CIEGO DE ÁVILA.— Una nueva población de jutía conguina, especie endémica en peligro de desaparecer, crece numéricamente en La Loma, uno de los islotes de los cayos de Ana María, al sur de Ciego de Ávila.
Oriol López, director técnico de la Empresa para la Conservación de la Flora y la Fauna en la provincia, explicó que la conguina habita en los manglares de La Salina, pero la caza indiscriminada del hombre obligó a introducirla en otro sitio y dio resultado. Esta acción forma parte de un programa iniciado en el 2005 para llevar a refugio seguro a tan pequeño roedor, exclusivo de la zona avileña.
De ocho individuos que se trasladaron a La Loma ya existen más de 30, con sus madrigueras formadas, indicó López, al referirse a recientes observaciones realizadas en el lugar.
Unido a estas labores de manejo se materializa otro proyecto de educación ambiental con los pobladores de la comunidad cercana en el municipio de Venezuela para enseñarles cómo cuidar esos valores naturales, precisó el director técnico de Flora y Fauna.
Durante el último conteo en La Salina, en el 2007, se detectaron 177 nidos que contenían entre dos y cuatro animales cada uno, y está previsto realizar otro a partir del 27 del mes en curso, acotó López.
La jutía conguina es de color pardo, mide unos 20 centímetros, pesa entre 200 y 420 gramos y se alimenta de mangle y de crustáceos.
Félix Pereira, especialista de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente en el territorio, explicó que el lugar donde viven estos animales está propuesto para incluirse dentro de los límites de ese refugio de fauna de significación nacional.
Consideró de muy acertada la idea de reproducir esta especie en otra área para ampliar su hábitat y mantener el equilibrio en el ecosistema cayos de Ana María, el cual constituye una extensa zona de la plataforma marina del sur avileño con variedades de importancia comercial.
