Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

El Duende

La tecla del duende

Algo cambia

«Extraño alguna reflexión en la columna», comenta una teclera. ¿Por qué no la envías tú misma?, respondo. Oído atento, teclado dispuesto. Aquí va...

Un amigo nuestro iba caminando al atardecer por una playa desierta. Mientras avanzaba divisó a otro hombre a lo lejos. Al acercarse, notó que el lugareño se agachaba constantemente, recogía algo y lo arrojaba al agua. Una y otra vez lanzaba cosas al océano... Eran estrellas de mar que se habían anclado en la arena y eran devueltas al agua, una por una. Nuestro amigo se sintió confundido...

—Buenas noches, amigo, me pregunto qué está haciendo.

—Devuelvo estas estrellas al mar. Ve, en este momento la marea está baja y todas ellas se quedaron en la costa. Si no las echo nuevamente se mueren aquí por falta de oxígeno.

—Ya entiendo —respondió mi amigo— pero ha de haber miles de estrellas de mar en esta playa. Es imposible tomarlas a todas... Además, seguramente esto pasa en cientos de playas a lo largo de toda la costa. ¿No se da cuenta de que no cambia nada?

El lugareño sonrió. Se agachó, levantó otra estrella y la lanzó al agua. —Para esta sí cambió algo, dijo.

Matanzas y Holguín

Los tecleros de Matanzas siguen llenando el Palacio de Junco. Nos cuenta el Moro que con Gloria Mónica al piano e Ildefonso en la guitarra rememoraron sus inicios como estudiantes. La enseñanza, ayer y hoy, vibró en los recuerdos.

Y los ocurrentes holguineros tampoco se detienen. En la Empresa Tabacalera Jesús Feliz Leyva II, en el reparto Peralta, se produjo un delicioso intercambio con los trabajadores y el director del centro. Anécdotas, poemas y el deseo de repetir la tertulia. Por lo pronto, este sábado, a las 10:00 a.m., se encontrarán en la Casa de la Prensa. Confluirá allí la premiación del concurso de frases de Sexo Sentido.

Grafiti

Bombón: Quisiera ser una de tus lágrimas: para nacer en tus ojos, correr por tus mejillas y morir en tu boca. Tu fiel admiradora

Cariño: Tus huellas se borraron de mi cuerpo, pero tus recuerdos perturban mis sentidos. Tu Tati

Ti: Aprendí que necesito buscarte, porque te extraño, y ¿por qué te extraño? Porque te adoro. La vida decidió que entraras y yo, desde aquel día 20, decidí que si podía y me dejabas, no te dejaría salir jamás. Ti amo

AWX: Las nubes no apagaron tu luz para mis ojos, conocí tus manchas, Sol, y las amé también. Angi

Osniel: Quiero tocar el ansia de tu timidez desnuda. Te amo. Barbara Lianet

Semillas

Un águila no anda a trote: —y esa es la vida— ¡hacer trotar un águila! José Martí

Comparte esta noticia

Enviar por E-mail

  • Los comentarios deben basarse en el respeto a los criterios.
  • No se admitirán ofensas, frases vulgares, ni palabras obscenas.
  • Nos reservamos el derecho de no publicar los que incumplan con las normas de este sitio.