La tecla del duende
Muy cerca de Cienfuegos conocí a Cynthia, joven sureña que me regaló una reflexión y de inmediato la comparto. Creo que pronto será una teclera más. ¿O ya lo es? Juzguen.
—¡Qué sábanas tan sucias cuelga la vecina en el tendedero! —le comentó una mujer a su marido—. Quizá necesita un jabón nuevo… ¡Ojalá pudiera ayudarla a lavar las sábanas!
El marido la miró sin decir palabra alguna.
Cada dos o tres días la mujer repetía su discurso, viendo a través de la ventana cómo tendía la ropa la vecina.
Al mes, la mujer se sorprendió al ver a la vecina tender las sábanas blancas, como nuevas, inmaculadas, y le dijo a su marido: —¡Mira, al fin aprendió a lavar su ropa! ¿Le habrá enseñado otra vecina?
El marido respondió: —No. ¡Hoy me he levantado bien temprano y he limpiado los vidrios de nuestra ventana!
A veces criticamos algo que desconocemos, sin pensar que quizá los equivocados somos nosotros. Todo está en el color del cristal con que se mire.
Los tuneros se reunieron durante el último fin de semana. Nieves cuenta: «Dicen que cada persona lleva dentro de sí un amanecer. Hoy nuestra tertulia fue testigo de varios amaneceres. La maestra Elvira Skurti nos arrancó suspiros con su guitarra; Argel Fernández y Leonel José hicieron latir los corazones, mientras que Pablo Viñales trajo la trova y cerró con la emblemática Yolanda. Hubo risas a cargo de Pascual, vinculando la abogacía con las características femeninas. Las Redes de Educación Popular y la Ecuménica Fe por Cuba estuvieron representadas. Se recordó a Bertha Cáceres, en el tercer aniversario de su muerte, para fundirnos en un abrazo hasta que el mundo se parezca más a la paz y menos al egoísmo».
En la Ciudad de los Parques, los tecleros se sumaron a una amplia jornada de celebración por el Día de la Prensa Cubana. Cary reporta que en la tertulia hablaron del rol de nuestras mujeres en la sociedad actual, de la solidaridad nuestra con Venezuela, de estudios de género… No faltaron los comentarios sobre las nuevas actividades en las que se involucran los nororientales y hubo excelente asistencia.
Grecia: Despertar sin tus ojos es ver mi jardín sin rocío. Havana.
Mimi: En esta o en la otra, juntos escalaremos el Everest. Sr. P
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