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Cuba desarrolla un programa de modernización de sus áreas agrícolas bajo riego que propicia un aumento en la eficiencia, una disminución en el consumo energético y un incremento en los niveles de producción, se informó en el III Encuentro Internacional Cubarriego 2007.
El doctor en Ciencias Reynaldo Rey García, director del Instituto de Investigaciones de Riego y Drenaje, explicó a JR que la estrategia del país no es crecer en áreas, sino en sustituir viejas tecnologías por otras más modernas.
«Tenemos aún unas 500 máquinas de pivote central de accionamiento hidráulico, muy consumidoras de energía, de las cuales las más jóvenes ya tienen 15 años. Por eso las estamos relevando por pivotes más modernos, de accionamiento eléctrico.
«Antes del período especial llegamos a contar con 1 084 000 hectáreas de tierra bajo riego. Esa cifra menguó bastante en la década pasada debido a la falta de financiamiento para el mantenimiento y la recuperación de las mismas.
«Hoy se ha detenido ese decrecimiento y la estrategia está encaminada a rescatar lo que hemos perdido, aunque aún no hemos podido llegar a la cantidad antes mencionada.
«De acuerdo con el abastecimiento de agua del país, nuestros suelos y las necesidades de los cultivos, prevemos que Cuba puede arribar a 2,7 millones de hectáreas de tierra bajo riego, como máximo. Pero un incremento en áreas de riego en el futuro tiene que hacerse sobre la base de un uso cada vez más eficiente de esa agua para regadío».
En el III Encuentro Internacional Cubarriego 2007 participan más de 150 delegados de 13 países. El mismo se extenderá hasta este jueves.
