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Ese proceder quirúrgico avanzado y costoso se emplea en 13 provincias y en el municipio especial de la Isla de la Juventud CAMAGÜEY.— El implante bucal, proceder quirúrgico que ya existe en 13 provincias y el municipio especial de la Isla de la Juventud, con excepción de Guantánamo, es expresión del desarrollo de esta especialidad y del prestigio de la salud cubana.
Entre los aportes del importante servicio sobresalen la estética del paciente y la funcionalidad del implante, que influye en una correcta deglución (tragar), fonación (acción de hablar), respiración y la masticación, que evita problemas digestivos.
Ignacio Guillermo Cardoso, miembro del Equipo Nacional de Implantología, explicó a JR que esta práctica, materializada principalmente en los países desarrollados, nació en Cuba desde la década de los 90, aunque su mayor impacto social tuvo lugar con la creación del Proyecto de Generalización de la Implantología en Cuba (PGIC), en el año 2006.
El también jefe de la Comisión de Implante Dental en el territorio agramontino expresó que su implementación en el país es resultado del desarrollo de esta especialidad, de la calidad profesional de los estomatólogos y del deseo de mejorar la calidad bucal del paciente y su salud biosicosocial.
Consideró el experto que la técnica, una de las más avanzadas en la rama de la estomatología en el mundo, es extremadamente costosa, con valor por pieza bucal implantada ascendente hasta los 1 800 dólares.
Una de las diferencias más notables del implante con respecto a la prótesis dental tradicional es que su colocación y permanencia no afecta a las piezas vecinas, cualidad que supera en extremo a la convencional, enfatizó el especialista.
La consulta de Implantología bucal, ubicada aquí en la Clínica Docente Provincial Ismael Clark y Mascaró, posee, al igual que sus homólogas en el país, un equipo multidisciplinario integrado por especialistas en Prótesis Dental, Cirugía Maxilofacial, Periodoncia, Ortodoncia, Estomatología General Integral (EGI) y Psicología, quienes valoran integralmente las condiciones bucales, biológicas, físicas y de higiene del paciente, previamente examinado en su área de atención.
En territorio camagüeyano se han intervenido ya a 32 pacientes, con 72 implantes colocados. De ellos varios con sobre-dentaduras (personas que usan prótesis dental total, tanto la inferior como la superior), sin rechazos hasta el presente.
Recientemente especialistas de Cuba y España intercambiaron experiencia profesional y científica aquí sobre sistemas de implante, y firmaron un convenio con la marca DEFCON que fortalece la práctica quirúrgica en ambas naciones.
En Cuba, aunque prevalece la marca Leader, italiana, que comenzó justamente con la aplicación del PGIC, ya se ha ampliado el sistema con más de diez firmas, todas registradas internacionalmente y dedicadas a la implantología en el mundo.
En el caso de la provincia de Guantánamo ya existe personal preparado para asumir este servicio.
