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«Más de dos millones de cubanos mayores de 18 años padecen actualmente de hipertensión arterial. Por la importancia del control de la misma y por ser a su vez un factor de riesgo de las enfermedades del corazón y cerebrovasculares, su tratamiento constituye un objetivo de primer orden de nuestro Sistema Nacional de Salud». Lo anterior lo sostuvo este jueves en conferencia de prensa el doctor Orlando Landrove, jefe del Programa Nacional de Enfermedades No Transmisibles, quien explicó que, con el propósito de prevenir, diagnosticar, evaluar y controlar esta afección en nuestra sociedad, se revitalizarán las acciones del Programa de Hipertensión Arterial. Se trata de un esfuerzo que, según el doctor Jorge Alfonso Guerra, tiene sus antecedentes en un estudio que se hizo a nivel nacional durante el año 1998, y que se concentra además en reducir la morbilidad, mortalidad, y otras enfermedades que se asocian a este padecimiento. Con tal motivo, destacó el especialista, se incrementarán las acciones de prevención primaria, las pesquisas y los diagnósticos. Para lograrlo se efectuarán actividades de capacitación con todo el personal médico,de enfermería y estudiantes de estas carreras pertenecientes a los policlínicos, y se garantizará la logística necesaria en esfigmomanómetros, estudios de laboratorios y arsenal terapéutico para estas acciones. Alfonso Guerra, también miembro de la Comisión Nacional de Hipertensión, reflexionó que como cada año un número considerable de nuevos individuos comienzan a padecer de hipertensión arterial, es necesario que la población tenga una mayor percepción de los peligros que implica. «Esta afección duplica el riesgo de enfermarse del corazón y acelera el proceso de arterioesclerosis. Por eso es tan importante su diagnóstico y tratamiento. Y son más vulnerables a padecerla aquellos que fuman, llevan una vida sedentaria o no tienen buenos hábitos alimenticios », consideró Delfín Pérez, presidente de la Comisión Nacional de Hipertensión. Un alto porciento de las personas que la padecen descuidan su control periódico, mientras otros no conocen que conviven con este «enemigo silencioso». Es indispensable saber, en primer lugar, si somos o no hipertensos, y de serlo, mantener la presión arterial bajo estricto control. Así lo advirtió el doctor Alfredo Dueñas durante el encuentro con la prensa. Los expertos dieron a conocer también que actualmente son miles las personas que fallecen en el esplendor de sus vidas como consecuencia de enfermedades favorecidas por la hipertensión arterial. Cada año en el mundo mueren más de siete millones a causa de la misma.
