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«Los jóvenes han sido siempre el sostén de la Revolución. Las sucesivas generaciones han ido asumiendo su papel. Lo importante es hoy incorporar a todos y hacerlo de forma amena, para que seamos parte de la defensa de los intereses de nuestro pueblo», expresó Ricardo Alarcón, miembro del Buró Político del Partido, en el acto por el quinto aniversario de la Cátedra José Antonio Echeverría, de la Universidad de La Habana.
El Salón de los Mártires de ese centro de altos estudios fue el escenario para el encuentro, en el cual el también presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular significó que su generación tiene la obligación de transmitir sus experiencias a los actuales estudiantes. «La fuerza de este pueblo está en su historia. Esa es el arma principal que tenemos», apuntó.
Por su parte Juan Nuiry, presidente de la Cátedra, recordó que esta se fundó hace cinco años con el objetivo central de estudiar la vida y obra de José Antonio Echeverría, el eterno presidente de la FEU.
«Además, precisó, la prioridad es que los estudiantes de hoy no salgan de la universidad solo con un diploma de licenciados, sino que posean también el título de revolucionarios».
La Cátedra atesora información sobre 84 mártires. Desde los ocho estudiantes de medicina fusilados el 27 de noviembre de 1871, hasta la estudiante de periodismo Tamara Bunke, quien murió en la guerrilla del Che, en 1967.
Nuiry anunció también que es propósito de la institución colocar en la Universidad de La Habana una estatua de José Antonio Echeverría, que recoja su impronta y se mezcle entre el estudiantado de hoy.
En el acto se encontraban presentes Miguel Díaz-Canel Bermúdez, miembro del Buró Político del Partido y ministro de Educación Superior; el general de brigada Fernando Vecino Alegret; Faure Chomón, dirigente del Directorio Revolucionario 13 de marzo y otros de sus integrantes; Gustavo Cobreiro, rector de la Universidad de La Habana, y Gilberto Tabares, presidente de la FEU en ese centro de estudios.
