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LAS TUNAS, enero 8.— La recuperación de riñones artificiales para los servicios de nefrología en varias provincias constituye un alto mérito del Taller de Electromedicina de Las Tunas. A los nuevos equipos instalados en hospitales de Ciego de Ávila, La Habana, Santiago de Cuba, Camagüey y Matanzas, se incorporaron los que estos territorios enviaron a Las Tunas para su reparación y con ello garantizar la hemodiálisis a pacientes con insuficiencia renal crónica, informó la AIN.
Con el título Talento y Sabiduría en Centro de Electromedicina, la página web Tiempo 21 explica que los técnicos e ingenieros que conforman la unidad son ejemplos de lo que se puede hacer con recursos locales y el empeño de un colectivo.
Esta web de la emisora provincial Radio Victoria significa que cada máquina de hemodiálisis le cuesta al país unos 17 000 dólares; sin embargo, las puestas de alta solo requirieron alrededor de 1 800 para su recuperación. Señala que cerca de 900 000 dólares también se ahorraron por la reparación de 39 máquinas de anestesia, en los dos últimos años, y se continúa en el empeño de buscarle solución a otros equipos defectuosos.
Ventiladores pulmonares, autoclaves, monitores de parámetros fisiológicos, mobiliario clínico, instrumental médico, sensores de temperaturas y electroválvulas figuran también entre los medios recuperados en el Taller de Electromedicina de Las Tunas.
