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Cuba recuerda hoy el aniversario 116 del inicio de su segunda guerra por la emancipación del colonialismo español, que tuvo en el Héroe Nacional José Martí su principal impulsor, afirma PL.
El 24 de febrero de 1895, los patriotas cubanos y amigos de otras partes del mundo volvieron a los campos con machete en mano y olor a pólvora en aras de hacer realidad sus anhelos de libertad.
Atrás quedó un período de 17 años desde el fin de la denominada contienda grande (1868-1878), en el cual existieron varios intentos insurrectos sin felices resultados para los independentistas de la mayor de las Antillas.
Levantamientos armados ocurrieron en diversos puntos de la geografía de la nación caribeña: Baire, Bayate, Ibarra... convocados por Martí, quien supo juntar a veteranos y jóvenes, y fundó el Partido Revolucionario Cubano.w
La Revolución de independencia, iniciada en Yara, después de preparación gloriosa y cruenta, ha entrado en Cuba en un nuevo período de guerra..., escribió el llamado Apóstol en el Manifiesto de Montecristi.
Firmado el 25 de marzo de 1895 también por el general en jefe del Ejército Libertador, Máximo Gómez, ese documento se convirtió en el programa de lucha del nuevo conflicto.
Martí, protagonista de una gran campaña de propaganda a favor de la causa cubana y latinoamericana principalmente desde Estados Unidos, fue capaz de revitalizar la llama esperanzadora de la Revolución.
Su palabra oral y escrita, presente en cartas, documentos, discursos y creaciones periodísticas, la coherencia entre dichos y hechos y el sacrifico sublime por la tierra natal levantaron al pueblo a favor de la emancipación.
Yo evoqué la guerra: mi responsabilidad comienza con ella, en vez de acabar. Para mí la patria, no será nunca triunfo, sino agonía y deber, sentenció el Maestro en carta al dominicano Federico Henríquez y Carvajal.
