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Lázaro López, Ciego de Ávila.— El cruce de la Trocha Militar Júcaro a Morón por Antonio Maceo y la conmemoración del aniversario 116 de la conformación del Ejército Invasor serán conmemorados aquí con talleres de investigación, homenajes y siembra de árboles en los lugares donde ocurrió la unión de las fuerzas insurrectas.
De acuerdo con el programa ofrecido a la prensa local, las actividades principales se efectuarán en la comunidad de Lázaro López, a unos 15 kilómetros al oeste de la capital provincial, lugar donde el 30 de noviembre de 1895 Máximo Gómez efectuó la parada militar de las columnas mambisas, cuya misión era extender la guerra al occidente de Cuba.
Félix Jorge Guerrero Vega, especialista de la Oficina de Asuntos Históricos del Comité Provincial del Partido, informó que en la escuela Ángel del Castillo, ubicada en el lugar, sesionará un taller sobre las luchas del siglo XIX en Ciego de Ávila, a partir de las investigaciones que registran nuevos enfrentamientos sobre todo en la contienda de 1895.
También se efectuó la siembra de ceibas en esa zona, donde investigaciones efectuadas por el propio Guerrero y Sixto Espinosa Dorta, presidente de la Unión Nacional de Historiadores de Cuba en la provincia, precisaron las condiciones para la permanencia de una gran fuerza militar a partir de las particularidades del terreno, entre ellas diversas fuentes de agua, abundantes pastos para la caballería y numerosos caminos interiores para desplegar la fuerza ante un ataque.
Después de cruzar la Trocha el 29 de noviembre de 1895, Maceo se agrupó con Gómez y las fuerzas villareñas en Lázaro López. Al día siguiente, en su arenga, el Generalísimo pronunció sus célebres palabras: «El día que no haya combate, será un día perdido».
