«Bendito Dios que unos une en esta Plaza. Siento gran alegría de encontrarme hoy entre ustedes, en esta Santa Misa dedicada a la Virgen de la Caridad del Cobre, donde nos unimos a ese concierto de voz de gracia, en busca de la verdad, del camino de la fe», expresó el Papa Benedicto XVI, como parte de la homilía de la Santa Misa que se celebra en la Plaza de la Revolución de La Habana.
«Saludo al cardenal Jaime Ortega, arzobispo de La Habana, y le agradezco las corteses palabras en nombre de todos. Extiendo mi saludo a los señores cardenales, a mis amigos de Cuba y otros países, a los sacerdotes, religiosos y a todo fieles congregados aquí, así como a las autoridades que nos acompañan.
Como parte de la homilía, el Sumo Pontífice añadió que «Dios nunca abandona a sus hijos, nunca nos olvida, está por encima de nosotros, cercano a su pueblo. Es el único que puede mostrar la verdad y dar la genuina libertad».