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Ernesto y Daniel Alejandro, junto a sus profesores, se alistan para la marcha del 27 de noviembre mientras se preparan profesionalmente. Autor: Raúl Pupo Publicado: 21/09/2017 | 05:27 pm
La imagen de los ocho estudiantes de Medicina fusilados injustamente el 27 de noviembre de 1871 por voluntarios españoles es una de las más conmovedoras de todas las que guarda la memoria colectiva del pueblo cubano.
Por eso cada año, ese día el pueblo, y especialmente los estudiantes universitarios reeditan una marcha desde la Universidad de La Habana hasta el Monumento erigido a las víctimas, a la salida del Túnel, en la zona conocida como La Punta.
«Nos convocan la historia y la vocación humanista compartida por quienes decidimos ser médicos. La misma de aquellos ocho jóvenes que soñaron curar y salvar vidas. Quienes marcharemos estamos convencidos de que jamás en Cuba se repetirán sucesos como el ocurrido hace 141 años», expresó Daniel Alejandro Pantaleón García, estudiante de segundo año de Medicina de la Facultad Manuel Fajardo, en la capital.
«Es una fecha donde se juntan muchos sentimientos. Es muy triste imaginar el dolor de aquellas madres que vieron cercenar las vidas de sus hijos cuando recién comenzaban a vivir. El abominable crimen solo logró fortalecer el sentimiento independentista de los cubanos, el cual permanece intacto», aseguró.
Ernesto Frómeta Soto, presidente de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) de la misma Facultad, precisó que este sábado desde muy temprano asistirá un grupo de estudiantes y profesores al Cementerio de Colón, para limpiar y embellecer las tumbas donde descansan los restos de los jóvenes mártires. Refirió también que el día 27 se realizará una guardia de honor que protagonizarán los estudiantes de Medicina más integrales de la capital.
En la Universidad de La Habana desde hace algunos días se convoca para asistir a la marcha por la efeméride. Rafael Rodríguez García, secretario general de la Unión de Jóvenes Comunistas en la casa de altos estudios, afirmó que para hacerla extensiva a los cerca de 8 000 estudiantes y 3 000 trabajadores de la legendaria institución se habilitaron carteles en todas las facultades y se enviaron correos electrónicos, a fin de organizar la congregación.
«Acordamos asistir con pulóveres blancos, porque simbolizan la pureza e inocencia, dos de los rasgos que distinguían a aquellos jóvenes. La responsabilidad nuestra con esta fecha es histórica. Ellos eran estudiantes de nuestra Universidad».
Rodríguez García explicó que el 27 de noviembre, a las tres de la tarde, se concentrarán los participantes en la Escalinata Universitaria, desde donde partirán hasta el monumento dedicado a los ocho estudiantes de Medicina.
Jairo Millo Gómez, quien cursa el tercer año de Derecho en la Universidad capitalina, manifestó su voluntad de asistir. Estimó que el país necesita de sus jóvenes para llevar a cabo todos los cambios en que está inmersa la nación, los cuales no podrán hacerse sin el compromiso con los más nobles sentimientos patrios.
Randy Perdomo García, estudiante de segundo año de Filosofía en la Universidad de La Habana, consideró como un homenaje a los ocho estudiantes de Medicina las actividades que se han venido desarrollando por la celebración del aniversario 90 de la FEU.
La realización de conciertos, el Fórum de Historia y las Jornadas Científicas recién concluidas son ejemplos de iniciativas para reanimar la memoria histórica y honrar a los jóvenes caídos en defensa de una Cuba más digna, entre los que se encuentran las víctimas de aquel 27 de noviembre.
«Durante el Primer Coloquio de Historia, Filosofía y Sociología nos propusimos incursionar en espacios menos tradicionales, como las redes sociales estudiantiles, a través de Internet. De esa manera contactamos con universitarios de Latinoamérica y sostuvimos debates de mucho provecho para fortalecer nuestros principios y reafirmar el papel histórico de los estudiantes», subrayó.
