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El Código de Ética del Sistema Nacional de Auditoría establece obrar con decoro y transparencia contra cualquier manifestación de indisciplina, negligencia, ilegalidad o corrupción administrativa. Autor: Roberto Suárez Publicado: 21/09/2017 | 05:29 pm
Como un compromiso de ser fieles a Martí, a Cuba y al pueblo catalogó Gladys María Bejerano, vicepresidenta del Consejo de Estado y contralora General de la República, la firma este 28 de enero del Código de Ética del Sistema Nacional de Auditoría, al que asistió el miembro del Buró Político del Partido y vicepresidente del Consejo de Estado Esteban Lazo Hernández.
Bejerano destacó que el Sistema Nacional de Auditoría es un cuerpo unido a favor de la educación, la integración y la superación, y que es preciso obrar con decoro y transparencia contra cualquier manifestación de indisciplina, negligencia ilegalidad o corrupción administrativa.
El acto de firma del Código de Ética comenzó en la Sala Avellaneda del Teatro Nacional y culminó con la rúbrica del documento en la Base del Monumento del Memorial José Martí, en la Plaza de la Revolución de La Habana.
Enma Daysi Parra Rojas, premio nacional de Auditoría, explicó que este Código constituye una declaración sobre los principios y valores que deben guiar la labor cotidiana de los auditores de Cuba.
El trabajo de los auditores es elevar la ejemplaridad y probidad de los directivos y trabajadores, como una condición inexcusable para la efectividad de la gestión de las organizaciones económicas, dijo Yoanis Rodríguez Cedeño, joven que se desempeña en esta labor.
Los asistentes, entre quienes se encontraban la heroína del Moncada Melba Hernández y las más altas autoridades de la Fiscalía Nacional de la República y el Tribunal Supremo Popular, depositaron una ofrenda floral al Héroe Nacional.
