Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

San Diego por mejores Baños

Realizan acciones de mantenimiento y restauración en el poblado conocido por las propiedades curativas de sus aguas mineromedicinales

Autor:

Mayra García Cardentey

LOS PALACIOS, Pinar del Río.— Cuenta la historia que el esclavo Taita Domingo padecía de lepra cuando llegó a los manantiales de aguas sulfurosas del río Caiguanabo, también conocido como San Diego. Abandonado por su dueño ante la penosa enfermedad, Taita Domingo llegó a estos inhóspitos parajes, donde se bañó en las corrientes y curó sus males.

Desde entonces la noticia del «milagro» de los caudales de esta zona se propagó tanto que, por 1775, acudían enfermos de varias regiones para tratarse afecciones de la piel y los huesos, debido a las propiedades curativas atribuidas a las aguas sulfurosas.

Desde tiempos remotos San Diego de los Baños es popular destino de vacaciones para los residentes de toda la Isla o como espacio para la curación física y espiritual.

Hoy, tras un período de complejas condiciones infraestructurales, el poblado acoge un programa de mantenimiento y restauración, en un despertar económico y sociocultural, para devolverle la dinámica de décadas atrás. Según informaron autoridades del territorio, allí se ejecuta un grupo de acciones dentro de la estrategia de desarrollo local del municipio, como la reparación capital del cine, el remozamiento de áreas deportivas y la puesta en marcha de un gimnasio biosaludable.unque paulatinamente la localidad cambia de imagen, una de las obras de mayor envergadura fue la reciente reapertura del hotel Libertad.

Con deplorable situación constructiva unos años atrás y cerrada en su totalidad en el 2013, hoy la instalación de alojamiento abre sus puertas completamente remozada con 21 habitaciones, de estas cinco con características especiales para personas con limitación física.

Carlos Manuel de la Cruz, director de la Empresa Municipal de Comercio y Gastronomía de Los Palacios, explicó que la reparación capital del centro incluyó una ampliación de servicios con parrillada y bar-cafetería, y la remodelación y construcción de locales nuevos.

De la Cruz insistió en que el acondicionamiento se pensó en función de los huéspedes que acudirán al lugar para recibir tratamientos terapéuticos y que no encontraban el confort necesario en las habitaciones.

La inversión puso en marcha un local de vital importancia para el alojamiento de quienes acudan al balneario por tratamientos médicos.

Bajo similares perspectivas se encuentra el hotel Saratoga, previsto para análogos procesos constructivos en aras de ampliar la capacidad habitacional para el turismo de naturaleza y de salud.

En este programa de rehabilitación integral, Amaury Padrón Ferrer, presidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular de Los Palacios, recalcó el máximo interés de los organismos competentes por la puesta en marcha del balneario, en situación precaria desde hace años.

«Ahora estamos restaurando una de las piscinas termales, vestidores y área de rehabilitación, para iniciar parte de los servicios con la reapertura del hotel Libertad», enfatizó.

Adelantó que se concibe un proyecto coordinado por las principales instancias del Ministerio de Salud Pública en la provincia para la total restauración de uno de los pocos centros de su tipo en el país que, gracias a las aguas mineromedicinales de las inmediaciones, puede brindar tratamientos antirreumáticos, dermatológicos, para el estrés, la puesta en forma, cosméticos, contra la obesidad, así como actividades para la tercera edad.

En San Diego igualmente se acomete un amplio cronograma para la reanimación del parque nacional La Güira, distinguido por la presencia de la naturaleza y las culturas europeas y asiáticas en su arquitectura.

Padrón Ferrer informó que para su reanimación se acometen acciones como la limpieza de un lago artificial para la pesca y los paseos en bote, la restauración de glorietas, embarcaderos, cabañas de alojamiento y servicios gastronómicos, así como el mantenimiento de áreas verdes en un conjunto de parques y vergeles.

Cuentan los antiguos del poblado que otrora era San Diego un pueblo animoso, lleno de turistas y pacientes atraídos por las bondades naturales de estos parajes. Poco a poco se espera revitalizar escenas de antaño.

Comparte esta noticia

Enviar por E-mail

  • Los comentarios deben basarse en el respeto a los criterios.
  • No se admitirán ofensas, frases vulgares, ni palabras obscenas.
  • Nos reservamos el derecho de no publicar los que incumplan con las normas de este sitio.