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SANCTI SPÍRITUS.— Dos nuevos servicios de Nefrología se inaugurarán en Cuba, a pesar de sus altos costos a nivel internacional, a fin de mejorar y elevar la calidad de vida de los pacientes aquejados con una enfermedad renal.
De acuerdo con Jorge F. Pérez-Oliva Díaz, director del Programa nacional de enfermedad renal, diálisis y trasplante, podrán ser atendidos los enfermos en las comunidades de Santa Rita, perteneciente a la provincia Granma y Caibarién, en Villa Clara.
Aseguró la fuente que el municipio espirituano de Trinidad cuenta con todas las condiciones para que, en un futuro no lejano, se pueda implantar el servicio que incluye el trinomio: prevención, trasplante y diálisis.
A juicio del galeno, el desarrollo de esta especialidad médica, gracias a la voluntad política del Estado cubano, ha propiciado la formación de 53 servicios en la Isla, con más de 350 nefrólogos capacitados para atender cualquier afección.
Pérez-Oliva Díaz explicó que se ha consolidado la calidad del tratamiento con tecnología de punta como, por ejemplo, el sistema de tratamiento de agua, implantado en Sancti Spíritus con un valor en el mercado internacional de más de 40 mil euros.
Similares a esa planta existen en el país desde el pasado año ocho, y se prevé instalar cinco nuevas durante este 2015.
La enfermedad renal, de acuerdo con el especialista, puede ser provocada por disímiles causas como la diabetes, hipertensión y padecimientos urológicos. Quienes precisan de las diálisis y trasplantes significa un fracaso para el sistema de salud cubano porque la política es minimizar la llegada a ese proceso, el cual es altamente costoso en cualquier país.
En Cuba —agregó- dentro de los servicios de Nefrología se atienden 270 pacientes por millón de habitantes. Aunque la cifra crece por año. Por ello, lo más importante para los galenos cubanos es elevar la calidad de sus servicios.
El Programa nacional de enfermedad renal, diálisis y trasplante está integrado por un grupo de especialistas que realizan la promoción de salud, la prevención y diagnóstico temprano, así como la rehabilitación integral del paciente trasplantado.
