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Ante la intensa sequía que azota a la oriental provincia de Guantánamo el Gobierno del territorio activó hoy su sistema de enfrentamiento a este fenómeno climátológico, informa Prensa Latina.
Nancy Acosta, presidenta de la Asamblea Provincial del Poder Popular, explicó a la prensa que la situación en estos momentos es crítica y se toman medidas urgentes para que las afectaciones a la población sean mínimas.
Entre las medidas adoptadas se encuentra el control sobre los grandes consumidores, la dosificación del abasto de agua y el llamado de atención a la población para que intensifique al máximo el ahorro.
Por su parte, Alfredo Correa, Delegado de Recursos Hidráulicos en el territorio, dijo que la mayor preocupación se concentra en los embalses Faustino Pérez y Pozo Azul, por el bajo nivel de llenado que presentan, destaca PL.
La primera, que abastece a la ciudad capital —donde se concentra la mayor cantidad de población y las principales industrias— en este momento se encuentran a un 32 por ciento.
Mientras, Pozo Azul, que abastece el más importante plan agrícola de la provincia, ubicado en el Valle de Caujerí, está a un 12 por ciento, lo que pone al borde del colapso el riego en esa zona, explicó Correa.
El directivo puntualizó a PL que el problema radica en que se sigue bombeando agua de estos embalses y sin embargo no se reabastecen porque hasta los manantiales y ríos de las montañas están casi secos.
Mientras, los municipios que dependen del abasto de las fuentes superficiales presentan una situación más crítica que los que se proveen de las presas, en lo que va de año las lluvias han sido tan escasas que sólo se han acumulado hasta la fecha 128 milímetros del preciado líquido, recordó.
