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Nueva sede de la televisión camagüeyana

Alfonso Noya Martínez, director general de la Televisión Cubana, inauguró la nueva sede del telecentro agramontino, ubicado ahora en áreas aledañas a la Plaza de la Revolución Mayor General Ignacio Agramonte y Loynaz

Autor:

Yahily Hernández Porto

Camagüey. — «Los jóvenes periodistas, junto a los más experimentados, así como los jóvenes realizadores en unidad con los profesionales más veteranos del sector, son indispensables para soñar y crear diariamente nuestra televisión», dijo Alfonso Noya Martínez, director general de la Televisión Cubana, durante la apertura de la nueva sede del telecentro agramontino, ubicado ahora en áreas aledañas a la Plaza de la Revolución Mayor General Ignacio Agramonte y Loynaz, en esta ciudad.

«Sin ese binomio —aseveró— es casi imposible dar el salto cualitativo al que aspiramos».

A propósito de la celebración de la Jornada por el Día de la Prensa en Cuba, Noya Martínez expresó a JR que la televisión trabaja estratégicamente en la preparación de todo su personal, para asumir las transformaciones sustanciales que en ella se desarrollan transversalizado por un contexto tecnológico que avanza en el país.

Subrayó que el escenario económico actual de la nación exige de los profesionales del ramo una optimización de los recursos financieros, tecnológicos y energéticos, la cual no puede afectar el proceso de hacer buena televisión; «creativa, atractiva, ética, responsable y de calidad», insistió. Durante el acto que agasajó a los periodistas en Camagüey, Noya aseguró que la piedra angular de la televisión cubana es contar con un ejército de creadores y profesionales formados durante más de 50 años. «Ellos son el elemento básico para poder hacer una mejor televisión».

Aseveró que dentro de los retos fundamentales de la televisión cubana se destacan el de preservar su autenticidad,  ante un contexto internacional tontería y chatarra informacional, y abrazar el pensamiento moderno.

Comentó que contar con una edificación moderna, como la de Camagüey, exige nuevos conceptos de trabajos, que implican una integración profesional en función de cuanto más se puede hacer por la localidad. «Esta es la misión estratégica de los telecentros provinciales y de sus corresponsalías municipales».

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