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Un enorme tren del amor cerró al actuación del grupo de títeres Tocororo, del Centro de Teatro de La Habana. Autor: Aileen Infante Vigil-Escalera Publicado: 21/09/2017 | 06:29 pm
El intranquilo niño va de un lugar a otro del parque detrás de su nuevo juguete: un globo azul que vuela tan alto como su imaginación. Al llamado repetido de la madre se acerca, le da un beso, la abraza fuerte con sus diminutas manos, sonríe. Darío Otero Martínez tiene solo seis años y desde los cuatro fue diagnosticado con el trastorno espectro autista (TEA).
El color azul representa a los autistas desde 2007, cuando los expertos compararon su amplia gama de tonalidades con el gran espectro del trastorno.Foto: Aileen Infante Vigil-Escalera
Otros infantes también juegan en las instalaciones del parque. Todos visten de azul y participan en el encuentro de personas autistas, organizado este 2016 por el Jardín Botánico Nacional (JBN).
Como en años anteriores, familiares y amigos de personas diagnosticadas con autismo realizan jornadas similares que tributan al necesario reconocimiento social de este trastorno. Las actividades de este año fomentaron además el cuidado, protección y conservación del medio ambiente y la flora cubana entre los pequeños con esta y otras discapacidades, explicó Julio Martínez Betancourt, subdirector de Educación ambiental y recreación del JBN.
El grupo de baile del centro psicopedagógico La Castellana animó la mañana con un homenaje a Benny Moré. Foto: Aileen Infante Vigil-Escalera
Una caminata ecológica, la inauguración de una exposición de obras realizadas por alumnos de escuelas especiales capitalinas y una charla educativa especial ocuparon la mayor parte de la jornada, en la que los más jóvenes también pudieron participar en el taller de integración para niños sin trastornos del espectro autista, organizado por el Proyecto Creciendo desde adentro, para niños con TAE, de Cáritas Habana.
Reunidos en el Parque de los Júcaros del JBN, grandes y chicos disfrutaron las propuestas culturales a cargo del grupo de baile de la escuela psicopedagógica La Castellana y del grupo de títeres Tocororo, del Centro de Teatro de La Habana. Una piñata con golosinas y otra gigante llena de globos se unieron a la siembra de un árbol.
Una inmensa capacidad imaginativa caracteriza a los pequeños con autismo. ¿Qué pasará por sus inquietas mentes? Foto: Aileen Infante Vigil-Escalera
Desde que en 2007 la Organización de Naciones Unidas declaró el 2 de abril como Día Mundial de la Concienciación del Autismo y al azul como su color representativo por tener tantas gamas de colores como tipologías el trastorno, en Cuba se realizan jornadas especiales dedicadas a difundir las particularidades y necesidades de las personas diagnosticadas.
La implicación de toda la familia en estas actividades es vital y contribuye enormemente al desarrollo psicológico de estos pequeños. Foto: Aileen Infante Vigil-Escalera
«Caracterizado por graves déficits del desarrollo que afectan la socialización, comunicación, imaginación, planificación, reciprocidad emocional y conductas repetitivas o inusuales, las personas con autismo todavía chocan con incomprensiones que persisten en determinados sectores de la población», aseguró Laude Cruz Camejo, directora de la escuela especial Dora Alonso, en Marianao.
Todos los participantes del encuentro corearon que Amor es la palabra más bella del mundo. Foto: Aileen Infante Vigil-Escalera
Con el objetivo de revertir esta situación, desde el 28 de marzo y hasta el 9 de abril próximos el proyecto Creciendo desde adentro desarrolla su cuarta jornada de apoyo a las personas con discapacidad y a sus familias. Entre sus principales iniciativas se encuentran talleres y charlas educativas a favor de la concienciación de este y otros trastornos como el Síndrome de Down, explicó Amine Parlá Malem, una de sus coordinadoras.
