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La escuela es el espacio ideal para educar en salud, es el espacio imprescindible donde el médico y el pedagogo inciden no solo en las potencialidades y capacidades de los individuos, sino también en el desarrollo y asunción de hábitos de vida saludables desde el abordaje de los diferentes contenidos de cada asignatura, a partir de un enfoque multisectorial y el trabajo sistemático con la familia.
Así expresó este martes Ena Elsa Velázquez Cobiella, ministra de Educación, en la conferencia inaugural del II Congreso Internacional de Promoción de Salud y el X Taller regional de promoción y educación para la salud en el ámbito escolar y universitario, eventos que sesionarán en el Palacio de Convenciones de la capital cubana, hasta el próximo jueves.
La escuela cubana no se sustenta solo en un modelo de transmisión de conocimientos, sino también en la formación de valores, de la personalidad y de habilidades en general de los educandos, a partir de estrategias concebidas para la satisfacción de las exigencias que a diario enfrentarán en su vida, agregó.
Especialistas del Ministerio de Educación y del Ministerio de Salud Pública participaron en la mañana en el panel La promoción de la salud: trabajo conjunto Mined-Minsap, más de 50 años de experiencia, en el que expusieron las diferentes estrategias de trabajo para lograr una toma de conciencia sanitaria desde el espacio educativo, y se compartieron las experiencias exitosas en Pinar del Río y Camagüey.
Desde Washington, el doctor Alfonso Contreras, consultor de la OPS/OMS (organizaciones Panamericana y Mundial de la Salud, respectivamente) para la Promoción de la Salud, a través de una videoconferencia, comentó a los participantes sobre la importancia de propiciar la participación desde el nivel comunitario para desarrollar la propuesta del Marco Estratégico Regional para la Promoción de la Salud y el Buen Vivir, con el objetivo de lograr la implementación de mejores prácticas y políticas para el desarrollo sostenible y creciente de la salud en las Américas.
En consonancia con ello, la doctora Rosaida Ochoa Soto, directora de la Unidad de Promoción de Salud y Prevención de Enfermedades, insistió en la necesidad de visualizar desde lo local que la promoción de salud debe enfocarse no solo en los factores de riesgo, sino en los determinantes sociales como el género, la edad y otros.
