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CIEGO DE ÁVILA.— Para el venidero curso escolar, en la provincia de Ciego de Ávila se pronostica una matrícula de 70 620 estudiantes, 1 122 más con respecto al año lectivo anterior. Sin embargo, la falta de cobertura docente continúa como el tema más complicado, pues son mayores las salidas de profesores que los que entran al sector.
Al abordar ese punto en la reunión de análisis para el inicio de las clases, la ministra de Educación, Ena Elsa Velázquez Cobiella, insistió en la necesidad de que las direcciones municipales lleguen a la base y sean creativas al buscar soluciones; pero, sobre todo, que se atiendan las necesidades de los docentes.
Es importante dar seguimiento a la atención de nuestros maestros y comprender sus dificultades. No es posible, por citar un ejemplo que puede pasar en cualquier lugar del país, que una profesora joven tenga un niño y todavía no se le haya otorgado el círculo infantil, pese a haberlo solicitado. Eso no puede suceder, expresó la Ministra.
Reconoció el esfuerzo en la provincia para tener completada la base material de estudio y la inversión para alistar los centros para el próximo período lectivo. No obstante, exhortó a ser flexibles en la solución de las necesidades de los maestros en los días que restan para el inicio del curso, en lo que calificó como el tema más complicado del sector en el territorio avileño.
De acuerdo con el informe presentado, para el comienzo de las clases, el próximo 5 de septiembre, en Ciego de Ávila se necesitan 6 314 profesores. De esa cantidad, se encuentran alistados 5 651, por lo que hay una necesidad de 663 docentes. Los municipios más afectados son Ciego de Ávila, con un déficit de 288 educadores, Morón (75) y Baraguá (67).
Estas carencias pueden solucionarse mediante diversas alternativas, a partir de la experiencia de años anteriores, como el contrato a docentes por horas, la inserción de estudiantes como maestros o el movimiento de otros profesionales con menos carga lectiva. De hecho, en la reunión se aseguró que todos los estudiantes contarán con su profesor.
Es importante notar que, si bien existe una disminución del éxodo de profesores con respecto a un lustro, cuando salían alrededor de 500 docentes por año, al finalizar el último curso 348 profesionales habían causado baja, cifra no compensada con los 269 graduados de las escuelas pedagógicas.
Los egresados del curso regular diurno con formación pedagógica no permiten paliar el déficit, y las causas de este fenómeno son diversas: desde búsqueda de empleos con mejor remuneración salarial hasta la opción de plazas donde existe menos carga laboral o la posibilidad de solventar soluciones materiales, como la cuestión de la vivienda.
Por eso resulta esperanzador, como trascendió en la reunión, la aprobación en la provincia de un plan de atención a los maestros del territorio y el seguimiento que se les debe dar a los docentes rurales, entre otras iniciativas. Algo necesario, pues la entrega de los profesores avileños se evidenció una vez más con los niveles de eficiencia alcanzados en las últimas pruebas de ingreso a la Educación Superior y la cobertura docente lograda para ese nivel de enseñanza, resultados reconocidos en el encuentro.
Se supo que en la provincia se recibieron 28 laboratorios de computación y que el equipamiento docente se encuentra prácticamente completo, junto con los uniformes, además del adecuado funcionamiento de los laboratorios de idioma. También se ejecutó la inversión de más de un millón de pesos en lo que va de año, dentro de un programa de cien millones destinados en el país a la construcción y rehabilitación de centros docentes.
