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José Ramón Monteagudo Ruiz, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido, resumió este viernes los dos días de sesiones del 8vo. Pleno del Comité Nacional de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (Anap), y calificó de profundas las intervenciones suscitadas en aras del funcionamiento de la organización campesina.
En el Centro Nacional de Capacitación de la Anap, en Artemisa, donde se reunieron los delegados de todo el país, Monteagudo reflexionó sobre el contexto en que transcurren los análisis de la organización, marcado por fechas históricas entrañables como el Aniversario 60 del congreso campesino en armas, el 150 del inicio de las luchas de liberación, y el 60 del triunfo de la Revolución, entre otras.
Sugirió aprovechar el marco del Aniversario 60 de la ANAP para perfeccionar el funcionamiento de la organización de manera integral, que redunde en la eficiencia, la batalla contra la corrupción y las ilegalidades, así como el uso racional de los recursos naturales, portadores energéticos e insumos.
Exhortó a lograr que las asambleas con los cooperativistas sean los espacios más generadores de compromisos, y donde se diagnostiquen con precisión los problemas que habrá que erradicar. Es ese el lugar donde se pueden objetivamente trazar planes, chequear su cumplimiento y lograr aglutinar al campesinado para producir lo que le pueblo demanda, según advirtió.
Yoel Palmero Meneses, miembro del Buró Nacional de la ANAP que atiende la esfera Agroalimentaria, subrayó la prioridad de la asociación campesina para aumentar la cifra de asociados e incorporar a los tenentes de tierra. Dijo que al término del tercer trimestre del año en curso había 388 888 asociados, de estos 73 332 mujeres.
Asimismo explicó que se han concluido y certificado 2 347 programas de desarrollo en las cooperativas, pero todavía 967 cooperativas no han concretado esa acción.
Palmero aseguró que este año se crece en los indicadores productivos, excepto en el frijol y el maíz, con un dos por ciento por debajo de lo logrado el año precedente.
Significó que al cierre de octubre se cumplió la venta de viandas al95 por ciento, las hortalizas al 104 por ciento, los frutales al 115 por ciento, el frijol al 131, 8 por ciento, el arroz al 16 por ciento y los frutales al 65 por ciento.
Por su parte, Rafael Santiesteban Pozo, presidente de la ANAP, se refirió a la necesidad de atender a los productores, pues son momentos de sumar no de restar asociados, por muchas razones estratégicas.
Insistió en la necesidad de fortalecer la cultura campesina y hacer tangible y efectivo el acompañamiento a los usufructuarios,en aras de que las tierras se exploten eficientemente.
Al referirse a los programas de desarrollo de las cooperativas, la vueltabajera Yuliedys Meneses, dijo que no se puede concebir a una cooperativa sin su programa de desarrollo, los cuales deben incluir a todos lo socios. Aseguró que estos deben contemplar el beneficio de la comunidad y lograr que se inserten en los programas de desarrollo local de cada territorio y de las empresas.
Fernando Ravelo, presidente de la CPA Amistad Cuba-México, en Artemisa, catalogó como brújula para la prosperidad a los programas de desarrollo de las cooperativas. Explicó que para elaborar el programa de su cooperativa se creó una comisión multifactorial y analizaron las fortalezas y debilidades que tenían. Ya el 70 por ciento de esa plataforma programática está dando frutos; y han recibido una serie de equipos y maquinarias para consolidar los objetivos de desarrollo.
La contratación debe incluir todo y a todos; y realizarse de manera particular con cada productor, precisó el cooperativista espirituano Alcides Madrigal Álvarez, quien dijo que esta debe hacerse finca por finca. Enfatizó que los compromisos son para cumplirse; y no solo debe crecerse en áreas, sino también en rendimientos productivos.
El joven Yumeykis Cruz Domínguez, presidente de la CPA Amistad Cubano-Bulgaro, en Mayabeque, precisó que para hacer una contratación objetiva hay que tener en cuenta a diversos organismo e instituciones, entre estas Recurso Hidráulicos, y acercarse a los centros científicos para que diagnostiquen los tipos de suelos, la calidad de estos y los insumos que se necesitan en aras de ahorrar.
«Antes de aplicar resultados científicos y ser rigurosos con la disciplina tecnológica, solo producíamos 60 000 quintales, ya estamos trabajando para en 2019 llegar a las 241 000 quintales. Tenemos como reto aumentar los rendimientos a 31 toneladas por hectáreas para alcanzar los 300 000 quintales a mediano plazo».
La disciplina tecnológica para todos los cultivos, pero específicamente para el tabaco fue un tema debatido en este Pleno. El Presidente de la ANAP apuntó que la producción tabacalera pudiera aportar mucho más si se respetan los procesos y se continúa trabajando en el proceso de dignificación de las cooperativas y los productores.
El programa tabacalero ha logrado un incremento paulatino de las áreas de siembra y la producción: cerca de 1 200 hectáreas e igual cifra en toneladas por año en los últimos períodos.
Entretanto, la venta de café al Estado este año crecerá un 20 por ciento en relación con la reportada en 2017, y la producción de miel cumplirá con sus compromisos pactados.
El sector cooperativo y campesino estimó que en la actual zafra azucarera 2018-2019 existe un área a cortar de 108 51 hectáreas, lo que representa un 18, 7 por ciento más que la contienda anterior.
Los rendimientos agrícolas de estas áreas cañeras se estiman que sean de 43, 7 toneladas por hectáreas, los cuales superan en 2, 4 toneladas por hectáreas a los reportados en la pasada contienda. Se entregará a la industria unas 25, 5 por ciento más de caña que la tributada en la pasada zafra.
Julio García, presidente de Azcuba, señaló que antes del 20 de diciembre deben arrancar los 48 centrales que participarán en la actual zafra, y se debe completar todos los equipos requeridos para asumir la contienda.
«Hay un plan de conjunto con la Anap para celebrar el Aniversario 60 de la organización que incluye la actualización del programa de desarrollo hasta el 2030. La cooperativa cañera hay que verla como una entidad integrar, comprometida con el autoabastecimiento local.
«Trabajaremos, además, en lainfraestructura de las cooperativas y la introducción y armonización de tecnologías. Destinaremos 10 millones de pesos para el desarrollo del riego en las cooperativas cañeras», precisó.
Gustavo Rodríguez Rollero, ministro de la Agricultura, aseveró que la cooperativa agropecuaria tiene un compromiso con la prosperidad, la cual se logra con la constancia en las buenas prácticas.
Exhortó a cambiar en un grupo de cooperativas la forma de acción de la junta directiva y lograr que esta se atempere a los momentos actuales, pues no es probable nunca más que una empresa vuelva a atender a un número excesivo de campesinos, como antes lo hacía. Para eso, apuntó, está la junta campesina y la asamblea. Y por eso debe haber una junta fuerte que defienda el concepto de no extinguir las cooperativas con problemas, a no ser que no quede alternativas para salvarlas.
Señaló que no se concibe una cooperativa que no tenga sus planes de desarrollo. Dijo que hay organizaciones internacionales que quieren colaborar, pero lo primero que exigen es que las bases productivas tengan sus expedientes de desarrollo conformados.
Rodríguez Rollero advirtió que falta conciencia para armonizar y concatenar los macroproyectos, como los trasvases, con los proyectos de las cooperativas.Insistió en recuperar el batey y el módulo de autoabastecimiento, enclaves tan importantes como la tierra para el desarrollo de las bases productivas.
Recalcó que no podemos seguir pensando en el barco, pues tenemos problemas financieros y habrá que apelar a plaguicidas alternativos como la tabaquina, para poder paliar la situación que estamos enfrentando.
«Vamos a seguir trabajando para desarrollar las cooperativas agropecuarias, pues solo habrá grupo empresarial y empresa, si hay cooperativas. La empresa tiene la obligación de atender a las cooperativas y estas de vincularse a la empresa», acotó.
