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El autor Heras León es un amante del ballet. Autor: Sergio Abel Reyes/ AIN Publicado: 21/09/2017 | 05:04 pm
Desde la platea, una selección de crónicas sobre el ballet escritas por Eduardo Heras León entre 1968 y 2007 para algunas publicaciones nacionales, se presentó en el espacio literario Sábado del Libro, en homenaje al 90 cumpleaños de la Prima Ballerina Assoluta Alicia Alonso, publicó la AIN.
Roberto Méndez, poeta, escritor y prologuista del volumen, destacó la sabiduría, equilibrio y elegancia de un título que va a la médula de la danza, y elogió la sensibilidad del autor, un periodista osado que registra cada detalle.
Miguel Iglesias, historiador del Ballet Nacional de Cuba (BNC), señaló que Heras León es un exponente de la prodigiosa década de los años 60, época en la cual la compañía cubana ganó el Grand Prix de París, se graduaron los primeros alumnos de Cubanacán y se consolidaban las Cuatro Joyas.
Iglesias expresó que también fue un fiel seguidor de las teorías del mítico crítico de ballet, el inglés Arnold Haskell, y comprendió que la técnica era un vocabulario para expresar sentimientos como propugna la Escuela Cubana de Ballet. Precisó que este escritor es un cronista, que da noticia y memoria del acontecer de su país.
Heras León narró una anécdota de cuando en 1962 estudiaba artillería cerca de Moscú y junto a sus colegas oficiales cubanos, desconocedores absolutos del ballet, asistieron a una función de Giselle en el Teatro Bolshoi. Dijo que fue la primera vez que pudo palpar el poder insondable, el caudal de belleza que alimenta al espíritu una función de ballet, porque todos sus acompañantes decidieron repetir la experiencia.
