Hay quienes leen más lento y ese sería el caso de Robert Lockman, quien el 2 de diciembre de 1941, cuando tenía nueve años de edad, sacó de la biblioteca de su pueblo, en Pennsylvania, el libro Val Rides the Oregon Trail, incapaz de imaginar que 75 años después pondría en aprietos a su hijo Robert, quien tras encontrar el libro en el sótano de la casa y, seguro de que su padre haría «lo correcto», fue a la Osterhot Free Library a devolverlo. Lo esperaba una multa de 554 dólares, pero solo provocó risas en la institución que decidió no cobrar el gravamen.