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El volante de contención Jaine Colomé es una figura clave en el once cubano. Foto: Calixto N. Llanes Llegó «la hora cero» para la selección cubana de fútbol, pues mañana debutamos contra Guadalupe en la fase final de la Copa del Caribe, con sede en Trinidad y Tobago.
San Vicente y las Granadinas y Guyana son las otras selecciones que completan el grupo «Bobby Sookram» (así se llama la llave, créanlo a no), cuyos partidos se dirimirán en el estadio Minnie Ramjohn, en Marabella.
Según muestran los dígitos de las dos primeras fases de esta Copa, en seis partidos el conjunto de Guadalupe presenta balance de cinco victorias y un fracaso, con 14 goles a favor y cuatro en contra. Su principal artillero es Dominique Mocka, autor de cinco perforaciones.
Mientras, Cuba exhibe cinco triunfos y un empate, con 24 dianas favorables y solo dos negativas. De tal manera, si los números no engañan, la balanza debe inclinarse hacia los nuestros.
Al cierre, con los choques Haití-Martinica y Barbados-Trinidad y Tobago, arrancaban las hostilidades en la otra zona, nombrada «Sedley Joseph», que se jugará en el portentoso estadio Hasley Crawford.
Los dos primeros equipos de cada llave accederán a la Copa de Oro Estados Unidos 2007 (en junio), la cual constituye, sin dudas, el «campeonato mundial» para la mayoría de los países miembros de CONCACAF. Los cubanos aspiran a clasificar por cuarta vez.
YENI BUSCA UN RÉCORDLa joven avileña Yeni Soto intentará hoy imponer un récord de dominio del balón, en el Balneario Universitario, al oeste de la capital.
Yeni se propone tocar la esférica ininterrumpidamente durante más de diez horas, una marca inédita para las damas.
