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Con un sugerente torneo mixto comenzó en Santa Clara el ajedrez de la IV Olimpiada Nacional. En total compiten 86 contendientes, entre ellos el Gran Maestro (GM) Leinier Domínguez, quien estrena su lugar 25 en el ranking mundial y el Elo récord nacional de 2695 puntos.
Fidel Corrales, coronado recientemente como el primer Gran Maestro de Pinar del Río. Otros que arrastran miradas son el campeón nacional Yuniesky Quesada (2567), de nuevo ante su público, y el subtitular Lelys Martínez (2499). También el pinareño Fidel Corrales (2502), convertido recientemente en el primer GM de su provincia. Al mismo tiempo, hay expectación por ver si mejora su rendimiento el GM tunero Lázaro Bruzón (2608).
Mientras, varias muchachas tienen la posibilidad de medir sus fuerzas con los varones, en un certamen de partidas semi rápidas —25 minutos para cada jugador, con cinco segundos de bonificación por jugada—, el cual se rige por el sistema suizo a nueve rondas.
Entre las convocadas están las experimentadas GM Maritza Arribas (2348), Sulennis Piña (2279) y Vivian Ramón (2177), así como la Maestra Internacional (MI) Yaniet Marrero (2232), integrante del último equipo olímpico.
Sarai Sánchez, de Venezuela, actual subcampeona panamericana. Pero fíjense además en el desempeño de la «generación pujante», donde sobresale la MI pinareña Lisandra Ordaz (2300). Aquí se incluyen asimismo la santiaguera Oleinnis Linares (2287), la matancera Yanira Vigoa (2251), la holguinera Lisandra Llaudy (2234), la capitalina Ivette Catalá (2144) y otras dos vueltabajeras: Zenia Corrales (2147) y Yerisbel Miranda (2177).
Los atletas cubanos se han dividido en seis equipos: Occidentales, Centrales, Orientales, Juveniles, Villa Clara y Universitarios. Además, participan dos conjuntos foráneos: uno de México y otro de Venezuela.
En este último hay nombres conocidos como el de Raphael Prasca (2392), un asiduo visitante al Memorial Capablanca, así como el de Sarai Sánchez (2274), subcampeona en el pasado campeonato continental femenino.
