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Con seis coronas se despidió el boxeo cubano del Grand Prix Usti Nad Labem, celebrado en la República Checa. La cosecha se suponía mayor, de acuerdo con la calidad de los rivales.
Hasta la velada decisiva llegaron ocho de nuestros hombres, pero dos de ellos cedieron ante rivales rusos. El primero fue el mosca vueltabajero Andry Laffita, quien cayó 20-11 ante Misha Aloyan, y el otro tropiezo fue para el superpesado Robert Alfonso, descalificado en el segundo asalto frente a Ilyaz Fayzullin, a quien había superado en la final de la pasada Olimpiada del Deporte cubano.
Contundentes fueron, sin embargo, los triunfos del gallo Yankiel León, tras un abultado veredicto de 21-3 frente al kazajo Assylan Kabylkhanov, y del pluma Idel Torriente, con un favorable 15-3 sobre el indio Lal Chhote Yadoav.
También abrumadoras fueron las ventajas conseguidas por el semicompleto Julio La Cruz y el crucero Osmay Acosta. Con un 23-3 frente al germano Edward Korby selló el jovencito agramontino su primer título internacional, en tanto Osmay ahogó las esperanzas de la afición local con un 14-5 sobre Vladmir Prusa.
El más exigido de la tropa cubana fue el ligero Yordenis Ugás, vencedor por 17-11 del ruso Vladimir Magzumov. En contraste, el welter Carlos Banteur se benefició por la ausencia del lituano Eduard Spakov.
Los restantes cetros fueron a parar a manos del ligero welter anfitrión Zdenek Chladek y el mediano australiano Jarrod Fletcher, este último representante de su país en los venideros Juegos Olímpicos de Beijing.
Este fue el cierre de la preparación en Europa rumbo a la cita estival china, donde también participarán el minimosca Yampier Hernández —su división no se convocó ahora—, el ligero welter Rosniel Iglesias y el mediano Emilio Correa. Los dos últimos fueron eliminados en cuartos de final durante el certamen checo.
