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El goce pulula entre los amantes del pugilismo en el estado venezolano de Carabobo, sede del torneo internacional de boxeo Batalla de Carabobo, donde cruzan guantes siete escuadras foráneas y dos elencos anfitriones. Sucede que, tras computarse las dos primeras fechas, el equipo representativo de la ciudad de Valencia ha quebrado los pronósticos y marcha al frente del torneo, con diez puntos.
Detrás se ubican los potentes elencos de Cuba y Venezuela, dueños de siete y seis unidades, respectivamente.
Un cable de la agencia Prensa Latina, reporta que Cuba exhibe siete éxitos y un fracaso. Los triunfos, mayoritariamente por amplia diferencia de puntos, pertenecen a los subcampeones olímpicos Carlos Banteur (69 kilogramos) y Emilio Correa (75), así como a los medallistas de bronce en Beijing 2008 Yampier Hernández (51 kg), Roniel Iglesias (64 kg) y Osmay Acosta (91 kg). También debutaron con éxito Idel Torriente (60 kg) y el pluma Iván Oñate.
Así, el único fracaso fue de Yanier Echeverría (48 kg), quien cedió 3-5 ante el dominicano Félix Solano, medallista de plata en el recién concluido torneo Córdova Cardín.
Pero la «fiesta de Carabobo» podría durar solo dos noches, pues al cierre de esta edición, tres boxeadores locales enfrentaban a sus más exigentes rivales cubanos. Correa se medía con Walker Julio; Oñate lo hacía con Luis Vázquez, e Iglesias peleaba contra José Morales.
Pero el mejor combate de los siete que disputaba Cuba se localizaba en los 54 kilos, entre el subcampeón olímpico Yankiel León y el dominicano Juan Carlos Payano, medallista de plata en los Juegos Panamericanos y en el Cardín 2009, pero en los pesos mosca.
