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Después del rotundo fracaso del seleccionado galo en el Mundial de Fútbol, Francia «revivió» deportivamente este sábado con el inicio del Tour de France, la cita del ciclismo de ruta más difícil del mundo. Pero el evento no inició con todos los aires a su favor.
El prólogo de la carrera, de 8,9 kilómetros en la ciudad holandesa de Rotterdam, fue ganado por el suizo Fabian Cancellara, del equipo Saxo Bank, con tiempo de 10:00 minutos. El segundo lugar fue para el alemán Tony Martin (Columbia), con 10:10.
Mientras, el estadounidense Lance Armstrong (Radioshack), quedó tercero con 10:22 y en el sexto peldaño culminó el último ganador del Tour, el español Alberto Contador (10:27).
Precisamente Contador vuelve a presentarse en esta ocasión como máximo favorito, al frente del combinado kazajo Astana. Sin embargo, Armstrong buscará su octava victoria y pretende arrebatarle el show al español durante las próximas tres semanas.
Muy pocos en realidad piensan que Armstrong, a sus 39 años, logre vestir nuevamente el maillot amarillo en su última aventura francesa, que terminará el 25 de julio en París. Según los especialistas, el norteño no tiene muchas posibilidades ante Contador, que parece imbatible en cada aparición sobre el asfalto.
De todas formas, el estadounidense se perfila con las mejores cartas para superar los imprevistos de los primeros siete días. En cambio, el gran momento del ibérico comenzará en la última semana del Tour, en los Pirineos y, posiblemente, en la contrarreloj en Burdeos.
Con toda esta atractiva batalla por delante, el fantasma del dopaje le dijo una vez más a esta carrera ciclística: puedes correr, pero no esconderte.
Primero, el español Xavier Florencio, del conjunto suizo Cérvelo, dio el campanazo al automedicarse con una pomada que contiene efedrina para tratar hemorroides. Esta sustancia aparece en la lista negra de la Unión Ciclista Internacional (UCI). Florencio, que reconoció su error, fue separado del equipo inmediatamente y no arrancó en Rotterdam.
Luego, el pedalista estadounidense Floyd Landis reiteró sus acusaciones por dopaje contra Armstrong. Landis admitió en una entrevista a The Washington Post que consumió testosterona, hormonas de crecimiento y eritroproyetina (EPO), siempre junto a Armstrong.
Además, dio explicaciones detalladas del supuesto proceso a que ambos se sometieron cuando eran compañeros en el equipo US Postal, entre 2001 y 2004. No es la primera vez que sucede, pues hace poco más de un mes Landis había hecho las primeras acusaciones, una caja de Pandora que por el momento nadie se atreve a destapar.
En este Tour de Francia compiten 22 equipos en 20 etapas (más el prólogo de este sábado). De todas ellas las más difíciles serán las dos escaladas al Tourmalet, un paso montañoso a 2 115 metros de altura sobre el nivel del mar, ubicado en los Pirineos franceses.
Así transcurrirá la edición 97 de esta emblemática carrera, que quiere hacerles olvidar a los franceses los desvaríos del fútbol en Sudáfrica.
