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Con paso firme, Cienfuegos alcanzó este viernes su victoria 53 en la presente temporada beisbolera, un nuevo récord para el equipo.
Era un día de fiesta, así que José Dariel Abreu se reencontró con los jonrones y Duniel Ibarra salvó su juego 24. El cerrador sureño está a un paso de igualar el tope nacional, en poder del pinareño Orestes González y el avileño Vladimir García.
Recordemos que en la serie 2002-2003 los cienfuegueros habían logrado 52 triunfos. Entonces clasificaron por primera vez para los play off, dirigidos por Narciso Ferrer.
Ahora tienen en mente superar la primera ronda de la postemporada, algo que sigue como su asignatura pendiente. Si llegan a colarse en semifinales, al menos podrían igualar el cuarto lugar conseguido en su segunda campaña nacional (1978-1979). Esa vez ganaron 31 juegos y perdieron 20, con Francisco Cantero como timonel.
«Ahora o nunca», dice la gente por ahí. Muchos piensan que este Cienfuegos se parece al Holguín de 2002.
De momento, los «elefantes» pueden dormir a pierna suelta. Mientras, Habana, Pinar, Sancti Spíritus e Industriales se juegan la vida todos los días.
Por el Oriente todo parece escrito, aunque Santiago no se rinda hasta el último día. Más allá de las bajas por cualquier causa a lo largo del torneo, el equipo indómito ha dejado mucho que desear.
No quiero hacer leña del árbol caído, pero en esta pelota Santiago tiene para clasificar. Cuando el río suena, es porque piedras trae.
