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Par de triunfos, cada uno con matices diferentes, apuntalaron aun más a Matanzas en la cima de la tabla de posiciones, propiciaron la extensión de su record de triunfos en una etapa clasificatoria, y de paso permitieron a los Cocodrilos lograr lo que ningún equipo había hecho antes: ganar todas las subseries de un tramo inicial de la temporada beisbolera.
Los yumurinos lograron uno de los triunfos con un sonoro KO y el otro in extremis, en la décima entrada. En uno de ellos descargaron una feroz ofensiva de 11 imparables sobre los lanzadores espirituanos, entre ellos los vuelacercas de Yordanis Samón y William Luis, quienes de conjunto propulsaron ocho de las diez anotaciones; en el otro fue el joven receptor Ariel Martínez el héroe con el cañonazo que dejó tendido a los Gallos, pero hasta ahí llegaron gracias a otro oportuno indiscutible de Eduardo Blanco en el octavo inning, que equilibró el pizarrón del (casi) inexpugnable estadio Victoria de Girón.
Las antípodas del estado de gracia que disfrutan los dirigidos por Víctor Mesa la ocupan los discípulos de Javier Méndez, quienes han cedido en sus últimas cinco presentaciones. Después de la barrida a domicilio que le recetaron los vigentes monarcas avileños, los capitalinos necesitaban una reacción que no aparece, y este lunes volvieron a naufragar en el puerto de los Piratas pineros.
A lo Azules le ha fallado todo en los momentos más cruciales, y otra vez fue Frank Montieth —primero mal defendido y luego bateado con libertad— quien desde la lomita no pudo enderezar la nave.
Esas falencias siguen siendo muy bien aprovechadas por otros candidatos a la zona caliente de la tabla, entre ellos la novena isleña, cuyo cierre empuja sus opciones de disputar, al menos, los «comodines» de la supervivencia.
Otro elenco «ilustre» que se mantiene en terapia es Pinar del Río, que por más partidos que tenga aplazados, ve sus alternativas apegadas casi al milagro. Ahora poco pudieron hacer los pativerdes frente a un Cienfuegos al que solo le impulsa la posibilidad de mejorar sus guarismos individuales y colectivos.
Sí conservan los sueños los Toros agramontinos, quienes necesitaron remontar en el cuartel general de los artemiseños, ya fuera de la carrera. Una ofensiva de 14 hits, incluidos los cuadrangulares de Humberto Bravo, Alexander Ayala y Dariel Avilés, dejó sin respuesta a los Cazadores y les mantuvo en la frontera del segmento de clasificación.
También aferrados a su privilegiada posición de clasificación directa quedaron los Cachorros holguineros, a pesar de dividir honores en el doble programa que sostuvieron en tierras de Mayabeque.
Otro que no vio perturbada su tranquilidad como escolta de los líderes fueron los Tigres avileños, aunque esta vez poco pudieron hacer para esquivar la derrota frente a la tropa villaclareña que contó con buena faena monticular de Freddy Asiel Álvarez y oportuno bateo de su tanda gruesa integrada por Raúl Reyes (4-2), Norel González (4-2) y Yeniet Pérez (5-3).
Tercera cruz en Monterrey
Con un amplio racimo de nueve anotaciones en la misma primera entrada, la selección cubana sub-18 que participa en el torneo Panamericano de la categoría en Monterrey, México, obtuvo su tercer triunfo en el torneo, ahora con un KO sobre Brasil en siete entradas y con pizarra de 13-0.
Los cubanitos conectaron un total de nueve hits y aprovecharon la discreta defensa rival que cometió tres errores.
Este fue el tercer éxito del elenco cubano, que debutó con victoria por no presentación de la representación de Honduras, y luego superó con ajustado marcador de 5-4 a Panamá. La única derrota que ha sufrido fue frente a la selección de los Estados Unidos con idéntica pizarra.
En otros resultados de la jornada, los invictos norteños aventajaron por 6-5 a Nicaragua, y Colombia sometió por 8-5 al equipo canalero.
La fecha del martes tiene previsto un descanso general, y un día después, en el horario nocturno, los cubanitos enfrentarán a la escuadra anfitriona.
