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Elisbet Gámez. Autor: Roberto Morejón Rodríguez/JIT Publicado: 18/01/2021 | 11:58 pm
La agitación en las piscinas del Complejo Baraguá, al este de La Habana, ratifica al instante la conjetura de quien llega una mañana cualquiera de diciembre y observa a su alrededor con el pensamiento incrustado en los Juegos Olímpicos. Minutos después, en conversación con atletas y entrenadores, el reportero comprobará que, en efecto, la fuerte preparación diaria está destinada, como objetivo fundamental, a la clasificación para la magna cita de Tokio 2020.
Y entre los equipos de clavados, natación artística y natación, sobresale la presencia de dos rostros conocidos: Luis Vega y Elisbet Gámez. «Nosotros tenemos cuatro figuras involucradas en la clasificación olímpica, encabezados por Gámez y Vega, que son nuestras principales esperanzas. A ellos se les suman Andrea Becali y Rodolfo Falcón Jr, que también están incluidos en la preparación porque participaron en el Mundial de su
categoría y pudiera ser que la FINA los invitara a Tokio», declara a JR Víctor García Fernández, jefe técnico de la Comisión Nacional de Natación.
«Tokio es el objetivo fundamental de nuestro equipo, pero también están este año los Juegos Panamericanos Juveniles, a celebrarse en septiembre de 2021, y donde tenemos involucrados al resto del elenco que busca las marcas A de clasificación para el certamen. La mayoría de nuestros atletas está entre 15 y 17 años, por lo que muchos tendrán en Cali un reto», añade García Fernández.
Sobre los casos específicos de Elisbet y Luis, precisa el técnico que tienen prevista su clasificación para la cita bajo los cinco aros en una fecha por decidir entre abril y mayo: «Posiblemente sea en una de las fases del Mare Nostrum, aunque antes ambos podrían ir a una competencia en Rusia que les sirva de preparación».
La selección nacional de natación, como la mayoría de las disciplinas deportivas en el país, sufrió un parón obligatorio el año pasado a causa del coronavirus. Sin embargo, con los cuatro atletas anteriormente mencionados y otros cuatro con proyección para los Paralímpicos, volvió antes a los entrenamientos, exactamente el 12 de octubre con una base en Granma.
«Hasta diciembre hicimos un período de nivelación internos y estamos muy satisfechos con las marcas de Vega y Gámez, quien, por ejemplo, estuvo a un segundo de su mejor crono, conseguido en Barranquilla, y estaría a aproximadamente un segundo del tiempo requerido para las Olimpiadas», explica García.
La propia Elisbet, por su parte, confiesa a JR en medio de algunos ejercicios físicos en el gimnasio del Complejo Baraguá: «En el control de diciembre salimos bastante bien, tras siete meses de poco entrenamiento. Yo estaba en Baracoa y allí traté de mantener la forma en ríos y playas, pero no es igual. Por eso superamos las expectativas en resultados, aunque el objetivo es hacer nuestras mejores marcas para lograr la clasificación olímpica.
«Los Juegos Olímpicos serán lo más importante de este año, pero después vienen los Centroamericanos, en el cual el propósito de los entrenadores y lo que me han pedido es la medalla de oro, aunque todo depende de cómo se proyecte la preparación de aquí a allá. Ojalá las condiciones aquí en Baraguá —sabemos cómo es el tema del agua fría en invierno, por ejemplo— nos ayuden a lograr el propósito», concluye la principal exponente de la natación femenina cubana.
