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Foto: Calixto N. Llanes La jornada internacional no termina, se multiplica e intensifica, hasta que los Cinco estén de vuelta a la Patria, y los terroristas Luis Posada Carriles y Orlando Bosch, junto al Gobierno de los Estados Unidos, rindan cuenta por sus crímenes, afirmó Ricardo Alarcón, presidente del Parlamento cubano, en el teatro Karl Marx, durante el acto por el aniversario 30 del crimen de Barbados.
El también miembro del Buró Político dijo a los familiares de las víctimas de Barbados que si Gerardo, Ramón, Antonio, Fernando y René hubiesen podido hacer sus hazañas hace 30 años, hoy no viviéramos con este dolor; y calificó de heroica la resistencia del pueblo cubano ante un imperio que «aborrece la verdad y cultiva la mentira y el engaño para proteger la impunidad de sus agentes».
Comentó que por iniciativa de la Universidad norteamericana George Washington se desclasificaron documentos que enfatizan el vínculo de Posada Carriles y Bosch con el crimen de Barbados, así como la complicidad del gobierno estadounidense. Bosch se justificó ayer ante la prensa norteamericana y declaró «que los esgrimistas merecían morir porque dedicaron sus triunfos a Fidel».
En el acto se escucharon los testimonios de Lucía Pérez Rodríguez, quien tenía dos años cuando su padre, el piloto Wilfredo Pérez Pérez, intentaba poner a salvo a los pasajeros del vuelo 455 de Cubana de Aviación.
Nordiel Andrés Ascunce también recordó el horror y la angustia que aún se dibuja en el rostro de su madre cuando recuerda el día de 1961 en que le dijeron del asesinato de su hermano, el maestro Manuel Ascunce.
En el tributo se escucharon las palabras de Magalis Llort, madre de Fernando González, uno de los cinco luchadores antiterroristas. Ella exigió justicia por los Cinco, quienes «sin violencia, a riesgo de sus vidas, tenían la misión de proteger a Cuba y a la humanidad de sujetos como Orlando Bosch y Luis Posada Carriles».
También el arte rindió su homenaje. Los versos declamados por el actor Jorge Ryan hablaron de consternación. De negro se vio entrar a Beatriz Márquez, en tributo a los caídos el 6 de octubre, quizá porque recuerda la alegría de los deportistas que la noche antes de morir compartieron con ella.
Carlos Alberto Cremata, guitarra en mano, desbordó ternura junto a sus pequeños de la compañía de teatro infantil La Colmenita. Este artista ha sabido convertir el dolor de la pérdida de su padre, integrante de la tripulación del CUT-1201, en amor y esperanza, los mismos sentimientos de su pueblo agredido.
ANTE LOS RESTOS DE LOS MÁRTIRESUna masiva peregrinación con las fotos de todos los mártires de Barbados en alto y una larga tela blanca donde se exigía justicia se realizó en la mañana de este viernes hasta el Panteón de las FAR, en el cementerio de Colón, donde descansan sus restos, en Ciudad de La Habana.
Entre las ofrendas florales colocadas allí a nombre de los familiares, trabajadores y pueblo de Cuba, figuraba la del Comandante en Jefe Fidel Castro, depositada en el lugar por Pedro Ross Leal, miembro del Buró Político, y el general de división Rogelio Acevedo, presidente del Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba, a los acordes de una marcha fúnebre ejecutada por la Banda de Música del Estado Mayor General de las FAR.
Estuvieron en el homenaje Lázara Mercedes López Acea, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido; Rolando Alfonso Borges, jefe del Departamento Ideológico del Comité Central; Julio Martínez, primer secretario de la UJC; Christian Jiménez, presidente del INDER; Alfredo López, ministro de la Pesca, y otros dirigentes.
