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Trabajadores de la Empresa exportadora e importadora de materiales de la construcción. Autor: Santiago Jerez Mustelier Publicado: 21/10/2021 | 11:43 pm
Yanet Silva Morales nació en Socialismo y quiere seguir viviendo en Socialismo. «Es el sistema más justo, que pondera el verdadero valor y la fuerza del pueblo, que preserva nuestra identidad cultural y nuestra soberanía», afirma la joven, quien es especialista de comunicación en la Empresa exportadora e importadora de materiales de la construcción (Imeco).
Más allá del innegable ambiente creativo y de intercambio que propician las plataformas de socialización digital, Yanet percibe que en los últimos tiempos se han convertido en un escenario contaminado, donde los cañones se enfilan hacia Cuba a través de bulos sin recato alguno. «Por eso (los jóvenes revolucionarios) seguiremos mostrando los sentimientos hacia la tierra que nos vio nacer, la realidad de nuestra Patria, muy distinta a las narrativas de odio y desesperanza que pretenden imponernos; hay mucho por hacer, pero solo será posible si prevalece la tranquilidad ciudadana y la paz entre los cubanos».
Para Leandro Fernández Pico, especialista de la dirección de Desarrollo y Mercado, que la convocatoria a marchar por un cambio el 15 de noviembre haya recibido el apoyo incondicional de Washington y los círculos de poder miamenses, así como de personas con expedientes de acciones violentas contra el orden interior es una señal de que «se trata de una acción provocativa y desestabilizadora que pretende fabricar un estallido en nuestras calles.
«No toleraremos campañas mediáticas diseñadas minuciosamente desde laboratorios y organizaciones no gubernamentales vinculadas o financiadas por el Gobierno norteamericano», dice Leandro, quien, además, encabeza el Comité de Base de la Unión de Jóvenes Comunistas.
Natalia Rojas de la Osa, especialista comercial, ve en la Constitución de 2019 las esencias del proyecto de país que quiere. «Lo estamos construyendo, pero necesita de la participación de todos, del empuje de los que queremos que nuestra nación siga marchando por la senda de la justicia social y el poder popular», sostiene.
Estos tres jóvenes respaldan la decisión del Gobierno cubano de no permitir a los organizadores la realización de la marcha solicitada para el 15 de noviembre pues, como afirma un editorial del Diario Granma, «sus propósitos declarados y su esquema organizativo develan una provocación articulada como parte de la estrategia de “cambio de régimen” para Cuba, ensayada antes en otros países».
Por ello junto su colectivo de trabajo y ante la imponente belleza de la bandera nacional desplegada sobre la pared de la explanada de Imeco, reafirmaron —en acto efectuado la mañana de este miércoles— que entre tantos caminos posibles de hacer avanzar la Isla, ninguno dependerá de potencias extranjeras y ni tampoco serán negociables la dignidad, los principios y la soberanía.
Dirigentes sindicales y directivos de la entidad arengaron por la paz, el bien común y por sostener y ensanchar cada conquista social alcanzada por la Revolución. También ponderaron su compromiso con promover el desarrollo económico desde la consolidación e impulso a la actividad exportadora. «Son momentos de hacer por el bien común, por muy pequeña que sea la acción», sentencia Yanet.
