Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Primeras obras y otras seducciones cinematográficas

El Festival de Cine de La Habana revoluciona siempre el último mes del año con sus propuestas para todos los gustos. Una de las categorías que mayor interés despierta es la de Ópera Prima

Autor:

Lourdes M. Benítez Cereijo

El apartado de Ópera Prima es uno de los que mayor interés despierta en los cinéfilos que colman las salas de cine durante las siempre animadas jornadas del Festival de Cine de La Habana. La edición 41 pone a consideración del público una selección de 18 filmes provenientes de países como Argentina, Brasil, Chile, Cuba, México, Guatemala, Venezuela, Colombia, Uruguay, Costa Rica y Perú.

El joven cineasta David Zonana llega por primera vez a Cuba para presentar Mano de obra, premiada en el IX BoliviaLab y en el XVI Concurso Nacional de Guion del Festival Internacional de Guanajuato; y seleccionada para participar en el Sundance-Morelia Lab en 2018 y en la Sección Oficial de San Sebastián.

La cinta habla de desigualdad, contrastes e injusticias en el México actual. Para ello presenta a Francisco, un obrero de la construcción que junto a un grupo de trabajadores levantan una casa de lujo en Ciudad de México. Tras la muerte accidental de su hermano en la obra, el protagonista se entera de que su cuñada viuda no recibirá ninguna indemnización del rico propietario de la casa. Después de soportar nuevos abusos contra él y sus colegas, y tras haber reclamado varias veces lo que les corresponde, finalmente se toma la justicia por su mano. De esta manera el director plantea una interrogante: ¿terminará devorado por el mundo contra el que está luchando?

En una entrevista firmada por María Lucía Expósito y publicada en la página oficial del Festival, David Zonana, quien ha colaborado en la producción de proyectos de Lucía Films como 600 millas (G. Ripstein, 2015), Chronic (M. Franco, 2015) y Las hijas de abril (M. Franco, 2017), asegura que su propósito «fue abordar el mundo de la construcción de una forma realista para aprovechar los contrastes naturales que existen entre la pobreza de los albañiles, el lujo de las obras que construyen y nada mejor que narrarlo de una forma casi documentalesca. Las locaciones donde viven los albañiles en la película son reales. La casa de la película es de un barrio rico de México. Usé albañiles como actores, a excepción de Francisco (el personaje principal). A mí me interesaba mucho tomar prestada esa realidad. A partir de ahí la historia, que es totalmente narrativa, es una ficción que se ubica en el mundo realista».

Si de historias duras e impactantes se trata, Muralla es de esas películas que no pasa indiferente a los ojos de los cinéfilos. No es casualidad que sea esa cinta la escogida para representar de Bolivia en los Premios Óscar.

Su director, Rodrigo «Gory» Patiño (dirigió y coescribió la serie de suspenso La entrega), nos aproxima a las desventuras de Coco «Muralla» River, un exguardameta de fútbol que, lejos del estrellato, ahora trabaja como conductor de minibús. Sin dinero y desesperado por no tener cómo pagar las facturas médicas de su hijo enfermo, se involucra con una siniestra red de tráfico de personas de Bolivia.

El objetivo de la película, además de visibilizar una triste y cruel realidad como es la trata de seres humanos, busca «contar una historia, entretener, intrigar, cuestionar a la gente. La película no tiene las respuestas, no es un planfleto, no tenemos un mensaje porque tampoco sabemos cuál es la solución, pero si es que después la gente comenta sobre el tema para nosotros es un objetivo logrado», afirmó el cineasta en una entrevista concedida a la agencia EFE.

En tanto, el chileno Sebastián Muñoz, concursa con El Príncipe, filme que se estrenó en la Semana de la Crítica del pasado Festival de Venecia, donde ganó el Queer Lion, y que además fue seleccionado para participar en el segmento Cine en Construcción en el Festival de San Sebastián 2018.

La película, basada en una novela escrita por Mario Cruz a principios de los años 70 del pasado siglo, y ambientada en la misma época, sitúa al espectador en una noche de borrachera y nos lleva hasta el momento en que Jaime, un veinteañero solitario y narcisista, acuchilla a su mejor amigo. En prisión conoce a El Potro, un hombre mayor y respetado que le brinda protección. Entre ambos nace una relación de ternura que lleva a Jaime a replantearse todo y le permite enfrentar las luchas de poder tras las rejas.

Catalogada por el propio director como una historia cruda, fuerte y atractiva, la obra explora las relaciones humanas y muestra «el afecto más allá del género. Es una mirada sobre la necesidad de amar. Los afectos son la base del ser humano, siempre van a existir y para mí esto es una puerta para decirle a la juventud que tienen que ser libres», sostiene Sebastián Muñoz.

Un diálogo más intimista, más personal es el que propone Sofía Quirós con Ceniza negra; y así lo reafirman sus palabras: «Siempre ha sido para mí una fascinación la forma en cómo los niños enfrenten el duelo desde un universo imaginario muy poderoso y sanador. Durante la escritura del guion me tocó ver morir a mi abuela. Los días siguientes a su partida, ella me seguía acompañando a través de las sombras, de los animales, tal como sucede en la película. Entonces entendí que esta no es una película de fantasía, es una historia que permite construir un imaginario único, ese que nos regala el duelo», explica la realizadora en LatAm cinema.

Ceniza negra, presentada en la Semana de la Crítica de Cannes y ganadora del primer lugar en el Foro de Presentación de Proyectos Costa Rica Festival Internacional de Cine, es protagonizada por Selva, una adolescente de 13 años que vive en un pueblo costero del Caribe. Después de la repentina desaparición de sus padres, se encuentra sola al cuidado de su abuelo, quien no tiene ganas de vivir. Entre sombras misteriosas y juegos salvajes, se pregunta si debe ayudar a su abuelo a cumplir su deseo, aun cuando esto significa que deberá enfrentar sola los últimos momentos de su infancia.

Con la breve reseña de estos cuatro filmes, de los 18 que integra la selección de Óperas Prima en concurso, nómina en la que destacan otros títulos como De nuevo otra vez, Pedro Bomba y El deseo de Ana, esperamos motivar a los amantes del séptimo arte durante esta nueva edición de la cita cinematográfica más importante de Cuba.

 

Ceniza Negra

El Príncipe

 

Muralla

Comparte esta noticia

Enviar por E-mail

  • Los comentarios deben basarse en el respeto a los criterios.
  • No se admitirán ofensas, frases vulgares, ni palabras obscenas.
  • Nos reservamos el derecho de no publicar los que incumplan con las normas de este sitio.