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Números en la pelota. Autor: LAZ Publicado: 21/09/2017 | 07:04 pm
Cuando falta un tercio para concluir la fase preliminar, no solo hay expectativa en torno a los posibles clasificados en el campeonato y la integración del equipo Cuba para el Premier 12, una tercera pregunta comienza a ganar protagonismo en los debates: ¿Dónde será el Juego de las Estrellas esta temporada?
Al inicio se manejó con intencionalidad la candidatura del Latinoamericano, comoquiera que La Habana festejará en noviembre su medio siglo de existencia y no habría mejor regalo para la afición capitalina que reunir a tantos estelares de ayer y de hoy en el coloso del Cerro.
Es una propuesta que enamoró casi sin haber sido lanzada la primera bola, y no hay dudas de que el argumento de los 500 y Por La Habana lo más Grande, merece un tratamiento especial.
Todo hubiera sido más fácil si Industriales hubiese tenido en los primeros dos tercios un mejor resultado competitivo, aunque comparte las mismas expectativas con varios conjuntos de lograr al menos un puesto de comodín.
Sin embargo, le ha aparecido un contrincante fuerte a la capital, pues los Toros de Camagüey han hecho con su juego que el Cándido González se abarrote y ese parque, que nunca ha organizado una serie de luminarias de este tipo, tiene méritos para ser tomado en cuenta a la hora de escoger la sede de dicho espectáculo.
El equipo que dirige Miguel Borroto se ubica en la vanguardia de la tabla de posiciones y tiene muchas posibilidades de asegurarse un pasaje directo al segundo tramo del campeonato. Ese argumento por sí solo bastaría para impactar en una decisión que generalmente ha tenido como criterio fundamental premiar a elencos más que a aficiones.
Sea cual sea la selección, lo recomendado es que se anuncie lo más pronto posible el anfitrión para que la provincia pueda asegurar la organización de una fiesta que amerita ser pensada en todos sus detalles y esplendor, pues solo una vez al año se reúnen en un mismo lugar tantos estelares de varias épocas.
Todo parece que se reduce a dos candidatos: dos urbes con más de medio milenio de existencia ambas. Una y otra afición esperan por el veredicto. Queda esperar.
