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Pepe Ramírez se refirió a la ausencia de Javier Jústiz en la primera ventana. Autor: Prensa Latina Publicado: 20/02/2020 | 08:43 pm
Las ventanas clasificatorias para la FIBA AmeriCup 2021 abrirán este viernes en la noche para el conjunto masculino cubano de baloncesto, y su primer adversario será Islas Vírgenes de Estados Unidos en el habanero Coliseo de la Ciudad Deportiva, conjunto al que enfrentarán de nuevo el lunes en Saint Thomas, para cerrar la ventana inicial. Los antillanos aparecen en el Grupo C, junto a virgenenses, dominicanos y canadienses.
Al menos en esta primera instancia el plantel dirigido por Pepe Ramírez no contará con los servicios del pívot santiaguero Javier Jústiz, sometido a una artroscopia para solucionar la rotura de menisco en su rodilla izquierda en Barcelona, por lo que se perderá el resto de la temporada de la ACB española con su club Casademont Zaragoza. Mientras que el habanero Jasiel Rivero, igual en la ACB, en definitiva jugará este viernes el encuentro inicial, luego de resolver cuestiones migratorias que retrasaron su llegada a Cuba desde territorio ibérico.
En un entrenamiento del conjunto cubano en el tabloncillo de la sala polivalente Ramón Fonst, Juventud Rebelde conversó con Ramírez, quien se auxilia de los preparadores Yoannis Zaldívar, Andrés González y Eduardo Moya.
«Los muchachos que han estado desde el primer día se han preparado muy bien, a pesar de algunas dificultades con la instalación donde solemos entrenar en otras ocasiones. Se ha cumplido el plan para esta etapa, aunque algunos jugadores se han ido incorporando en los últimos días a causa de sus contratos en el exterior, lo que puede afectar el acople del equipo. Los últimos en llegar fueron el espirituano Yoanki Mencía y el avileño Pedro Bombino, este miércoles, procedentes de Argentina, quienes ingresaron a los entrenamientos con mucha disposición.
«Hemos trabajado mucho en potenciar el volumen de tiros en cada uno de los jugadores de cara al primer partido ante Islas Vírgenes de Estados Unidos, un conjunto que es muy competitivo y con algunas individualidades que acumulan muchas horas de experiencia en diferentes ligas. Es parte de nuestra estrategia que este equipo sea el que derrotemos en pos de nuestras aspiraciones y enfrente con voluntad de triunfo la segunda ventana en noviembre, en la que esperamos disponer de Jústiz.
«Su ausencia representa un hueco grande, porque con él contábamos con la talla, pues casi todo nuestro sistema estaba montado para que la bola se moviera por el juego interior, y ahora esa estrategia hay que modificarla un poco. Yoel Cubilla tiene que ocupar el papel de Jústiz, esperamos que su experiencia reciente en Argentina favorezca al equipo y que muestre su efectividad habitual en los rebotes, un aspecto en el que debemos insistir», explicó.
Agregó que el grupo de Cuba y los otros tres son fuertes y enfrentar este torneo es una manera eficiente de crecer como deporte, pues se comprobará, una vez más, la realidad y la calidad del baloncesto en nuestro continente, y la pretensión es estar entre los ocho primeros de América, lo que facilitaría acceder a otros torneos de mayor nivel.
«De igual manera, este sistema competitivo le permite a la afición cubana ver a su selección jugar en la Isla, y eso favorece el ánimo de los atletas en aras de luchar por la victoria. Verán competir a Islas Vírgenes, Canadá y República Dominicana en esta etapa, y si avanzamos, pues nos visitarán contrarios de más nivel. El objetivo es incluirnos entre los 12 conjuntos principales, de ahí que es vital vencer en los dos primeros choques», finalizó.
