El viceministro boliviano de Coordinación con los Movimientos Sociales, Alfredo Rada, inauguró la III Escuela de Formación Política. Autor: ABI Publicado: 21/09/2017 | 05:54 pm
LA PAZ, agosto 25.—El XX Foro de Sao Paulo inició este lunes con la III Escuela de Formación Política, que debatió sobre la crisis actual del capitalismo y el desarrollo de la integración en América Latina y el Caribe.
La apertura oficial del Foro, que tiene por sede la capital boliviana, será el próximo 28, y los representantes de 180 partidos y organizaciones sociales de tendencia progresista tendrán estos días disímiles actividades, reportó PL.
Arístides Valer, secretario de Relaciones Internacionales del Partido Comunista del Perú, alertó ante el Foro de Sao Paulo que las potencias no tienen salida a su crisis y se volverán más agresivas porque están perdiendo influencia.
«No solo usarán la diplomacia y los acuerdos, sino acudirán a la guerra como instrumento de opresión y para defender sus intereses», precisó el funcionario.
En ese punto consideró que los pueblos, los gobiernos y movimientos sociales de Latinoamérica y el Caribe tienen que fortalecer su unidad y trabajar juntos para erradicar de una vez las políticas neoliberales.
Por otra parte, según trascendió, Cuba defenderá en la cita la viabilidad del socialismo ante la crisis del capitalismo, causante de violencia, inestabilidad, descontento e inseguridad en muchos países del planeta.
Idalmis Brooks, del departamento de Relaciones Internacionales del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, aseguró a PL, que existe un reordenamiento del mapa mundial propiciado por los intereses de las grandes potencias desde el mismo inicio de la recesión global.
A su juicio, más allá del impacto económico, esos cambios conllevaron a la inconformidad social, protestas y conflictos en regiones como Oriente Medio.
Brooks precisó que Cuba promueve la idea de que los procesos integracionistas de América Latina y el Caribe deben basarse en la unidad dentro de la diversidad y el respeto mutuo.
En ese punto hizo alusión a proyectos con visiones comunes como el Buen Vivir en Ecuador, el Vivir Bien en Bolivia y Un mundo mejor es posible de Cuba, que apuntan a la convivencia armónica y sostenible del hombre con la naturaleza.
«Es una de las banderas que Cuba siempre ha defendido, somos pueblos diferentes con metas bien parecidas, y esos principios los defenderemos en cada espacio», aseguró.
Asimismo, el Frente Socialista de Puerto Rico consideró al Foro de Sao Paulo como un escenario importante para exponer la causa de descolonización de su país y de las Islas Malvinas.
Gustavo Enríquez, coordinador de esa agrupación, expresó que su participación en el evento desde hace 20 años le permitió dar mayor proyección internacional a su demanda.
Enríquez también consideró la evolución del Foro de Sao Paulo como un proceso determinante para el desarrollo político en América Latina y el Caribe, así como de la integración regional frente a la hegemonía capitalista.
La III Escuela de Formación Política, que reúne a 300 delegados, sesionará hasta este martes.
Los participantes analizarán también la situación actual de sus instrumentos e instituciones, así como sus retos de representatividad y los de los movimientos sociales. Durante el Foro también se realizarán encuentros de jóvenes, mujeres, afrodescendientes y parlamentarios.
El VI Encuentro de Juventudes, cuyo propósito es examinar las políticas nacionales dirigidas a ese sector, abordará también la participación de las nuevas generaciones en la defensa de los procesos progresistas en América Latina y acerca de cuál es su rol dentro de la integración regional.
El Foro de Sao Paulo será clausurado el viernes y emitirá una Declaración final que incluirá la exigencia del cese inmediato del bloqueo económico, financiero y comercial de Estados Unidos contra Cuba, el apoyo a la causa de Argentina por recuperar las Islas Malvinas y a la demanda boliviana ante Chile para tener una salida soberana al mar, entre otros importantes temas.
El Foro de Sao Paulo nació en 1990 en la ciudad homónima brasileña a propuesta del Partido de los Trabajadores, entonces liderado por Luiz Inacio Lula da Silva, con el objetivo de convocar al debate sobre el escenario internacional.
