Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Oxígeno cultural a Corazón adentro (+ Fotos y Videos)

En tiempos de COVID-19, los colaboradores cubanos de esa misión en Venezuela no cesan su labor comunitaria, tal y como soñaron hace 12 años Fidel Castro y Hugo Chávez

Autor:

Lisandra Gómez Guerra

Cuando se rompe el silencio de la calle San José, en la parroquia San Simón Centro, del municipio venezolano de Maturín, pone en alerta a toda la comunidad. Basta con escuchar el primer silbato para que escapen los gritos de alegría, principalmente infantiles, de quienes salen corriendo de las casas hacia la gran explanada.

Desde las ventanas, el resto de la familia se suma. Aunque siempre están los más atrevidos, otros se acomodan desde la distancia para disfrutar de la algarabía. Pocos se quieren perder los cuentos, juegos de participación y charlas educativas que los colaboradores cubanos regalan, incluso en tiempos de COVID-19.

«Protagonizamos actividades culturales comunitarias dedicadas fundamentalmente a niños y niñas, así como a adultos mayores, aunque se puede incorporar toda la familia. Se planifican y organizan cumpliendo las medidas de distanciamiento y el uso del nasobuco.

«Esa tarea la alternamos con nuestra incorporación, junto al personal de salud, a las pesquisas activas para detectar en la población síntomas del virus SARS-Cov-2», cuenta vía WhatsApp Orisel Chacón Hernández, Coordinadora Nacional de la Misión Cultura Corazón Adentro en la República Bolivariana de Venezuela.

Y es que la llegada de la pandemia obligó al grupo de 35 colaboradores de la misión cubana que siembran arte, emociones y valores a reestructurar su quehacer. Tuvieron que alejarse de los teatros y olvidar aquellos días en que las multitudes los ovacionaban, y eso les impulsó a diseñar encuentros diferentes con sus públicos. Así respondían también al llamado de Nicolás Maduro, presidente de esa nación, para atenuar las consecuencias de la pandemia desde la cultura y recreación.

«Nos concentramos en juegos de participación que no involucran contacto físico, narraciones orales, manualidades, lecturas… actividades donde nuestros muchachos se desdoblan en payasos o mimos. Realmente se ha puesto a prueba la creatividad de nuestros colaboradores», refiere Chacón.

Basta con navegar por las redes sociales para confirmar que también esos espacios se han convertido en sus mejores escenarios, donde multiplican pequeñas cápsulas se han hecho virales más allá de la geografía venezolana.

«Se publican cuentos y canciones tradicionales para que se diviertan mediante simpáticos personajes que les enseñan sobre literatura venezolana y universal. Además, hemos llevado hasta allí la convocatoria del 4to. Foro de Experiencia Significativas para analizar las mejores experiencias en el trabajo sociocultural comunitario realizado en esta nación en los últimos meses», aclara.

Derroche de buena miel

Una alternativa vital en estos tiempos complejos que permitirá visualizar una de las más grandes alegrías de la Misión Cultura Corazón Adentro en la tierra de Hugo Chávez es el resurgir de la Colmenas Bolivarianas.

«En el año 2019 el proyecto cumplía 10 años y solo existían dos núcleos colmeneros activos en el país, por lo que trabajamos intensamente en su reactivación. Fue muy importante la incorporación de animadores y facilitadores culturales que ya habían tenido la experiencia de formar parte del proyecto con asesoría de nuestro país. Nos fuimos a las comunidades a explicar su valía y objetivos. Se impartieron talleres y en agosto del pasado año disfrutamos de la presentación simultánea de las colmenas en los 24 estados de Venezuela», añade la entrevistada.

Desde entonces, las inquietas abejitas y abejorros han descubierto las tradiciones culturales de la nación latinoamericana. Avivarles su vuelo ha unido a muchas buenas manos y corazones.

«Se dieron talleres a los padres, quienes se convirtieron en entes activos del proyecto e incluso algunos participan en las obras. En varios de los núcleos colmeneros se han insertado niños y niñas con necesidades educativas especiales. Por eso ha recibido la aceptación y el cariño de todos. Los resultados positivos han permitido que las autoridades los apoyen; tanto así, que hicieron giras por los municipios y parroquias y eso permitió que se estimulara la creación de nuevos núcleos. Todos querían ser parte de lo que estaban viendo.

Algo interesante que sucedió fue que las Colmenitas Bolivarianas dejaron de ser un proyecto de la Misión Cultura para ser uno querido y apoyado por todas las misiones sociales cubanas acá en Venezuela, y eso es de las mejores cosas que ha podido pasar», añade quien desde su llegada sacó de la maleta su experiencia como directora provincial de cultura en Santiago de Cuba y todos los aprendizajes en sus diálogos estrechos con la enseñanza artística, la Asociación Hermanos Saíz (AHS) y la Brigada Instructores de arte José Martí (BIJM).

Orisel Chacón Hernández y el resto de los colaboradores de la Misión Cultura Corazón Adentro tienen muy poco tiempo libre en las últimas semanas. Las pesquisas y las actividades comunitarias llevan de prisa al colectivo. Son protagonistas de una labor que da rienda suelta a lo imaginado hace 12 años, hija de esa amistad entre Fidel Castro y Hugo Chávez que ha dejado muy buenos frutos.

«De este país nunca olvidaré su belleza, su rica cultura e historia. Me llevaré la admiración infinita que siento por su pueblo por su fidelidad al legado de Chávez y su compromiso de acompañar al presidente Maduro en esta batalla colosal por la soberanía. Y sobre todo no olvidaré que aquí no se viene a imponer ni a dictar: estamos para dar nuestras experiencias y a aprender mucho», dice mientras se despide con una sonrisa en la que aflora la añoranza por su tierra cuna, su conga y su Alameda.

Comparte esta noticia

Enviar por E-mail

  • Los comentarios deben basarse en el respeto a los criterios.
  • No se admitirán ofensas, frases vulgares, ni palabras obscenas.
  • Nos reservamos el derecho de no publicar los que incumplan con las normas de este sitio.