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BEIRUT, agosto 2.— Siete civiles murieron este miércoles durante un intenso bombardeo israelí sobre áreas del este de la ciudad portuaria de Tiro, en el sur del Líbano, informó la policía en Beirut, mientras que una verdadera lluvia de misiles del grupo chiita Hizbolá (Partido de Dios) cayó en territorio israelí.
La policía reportó que en tan solo una hora, la fuerza aérea israelí realizó 27 ataques contra pueblos al este de Tiro, mientras 200 morteros bombardeaban el área.
Según DPA, una pareja de 80 años de edad falleció tras un ataque contra su vivienda en Tair Harfa, y otras cinco personas murieron bajo los escombros de su edificio en el pueblo de Yaroun.
Fuentes hospitalarias en Tiro indicaron que la cantidad total de libaneses muertos es ahora de 627, mientras que unos 2 000 han resultado heridos desde que Israel comenzó su agresión el 12 de julio.
Asimismo, la aviación sionista realizó vuelos sobre Baalbek y Dar al Baida, al sur del Líbano, y bombardeó Berket al Joubur, en la parte occidental del Valle de la Bekaa, informaron dos canales de televisión libaneses.
Por su parte, ANSA reportó que Hizbolá lanzó durante la jornada su mayor ofensiva desde el inicio de la guerra, con 200 misiles contra territorio de Israel, que tuvieron el mayor alcance en suelo israelí a unos 70 kilómetros de la frontera.
Asimismo, dos soldados resultaron heridos de gravedad en combates en el sur libanés, mientras que Arab News Network informó de un efectivo sionista fallecido, el número 24.
La radio militar israelí confirmó la cifra de proyectiles libaneses. Las ciudades más afectadas fueron Safed, Rosh Pinna, Tiberíades, Kiryat Shmone, Metulla y Hatzor.
Hasta el momento, unas 900 000 personas fueron evacuadas del Líbano y pronto la cifra llegará al millón un cuarto de toda la población, según estimados de la agencia de Naciones Unidas para los refugiados.
