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Ciudadanos distribuyen por todo el país las boletas para la consulta popular del domingo, a pesar de que el Congreso y la Corte Suprema de Justicia rechazan su realización
WASHINGTON/TEGUCIGALPA, junio 26.— Los países miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA) respaldaron este viernes en el pleno del Consejo Permanente que se reunió de forma extraordinaria, la propuesta de Honduras de aplicar en este país centroamericano la Carta Interamericana a fin de promover la institucionalidad democrática y el gobierno legalmente constituido, tras el intento de golpe de Estado técnico, reportó TeleSur.
La OEA respondió a la iniciativa, presentada este viernes por el embajador hondureño ante la OEA, Carlos Sosa, quien solicitó «apoyar decididamente al gobierno constitucional y democrático de la república de Honduras ante las actuales circunstancias», que ponen en riesgo la institucionalidad, pero, afirmó «hay todo un pueblo para defenderlo», anotó PL.
«Los Gobiernos del ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América) al conocer las denuncias de desestabilización en Honduras declaramos que nos movilizaremos junto al pueblo hondureño», declaró el diplomático venezolano ante la OEA, Roy Chaderton, quien denunció que lo que está ocurriendo en Honduras es «una maniobra desestabilizadora con apoyo de la cúpula militar en contra del Gobierno democrático del presidente de la nación, Manuel Zelaya».
Chaderton insistió en que se está «a tiempo de actuar con carácter de urgencia para evitar que una fiesta se nos convierta en tragedia», aclarando que con la palabra «fiesta» aludía a las movilizaciones del pueblo hondureño en apoyo a su presidente, apunta TeleSur.
Mientras, el presidente Manuel Zelaya ha confirmado su llamado a los hondureños a realizar una jornada cívica que muestre la democracia y la transparencia del país, y cientos de ciudadanos distribuyen el material electoral que garantizará en 15 000 casillas electorales la consulta popular prevista para el domingo en ese país centroamericano, a pesar de que el Congreso y la Corte Suprema de Justicia rechazan su realización, según informó PL, porque votarían la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente que reforme la Carta Magna del país.
«El pueblo va a hablar en las urnas en el domingo», dijo Zelaya citado por la Agencia Púlsar, a la vez que afirmaba que las élites «no quieren que hayan cambios en Honduras, pero los cambios del pueblo nadie los detiene».
En cuanto a la reunión en la OEA, el embajador venezolano también denunció que los intentos de la oligarquía de revertir el legítimo gobierno del presidente Zelaya es una «película que no es nueva, esto es un replay, ya ocurrió en Venezuela en 2002, ha ocurrido en Ecuador, ha ocurrido en Bolivia, está ocurriendo en Honduras», y que son «intentos frustrados de la cúpula mediática, empresarial y militar que se niegan a admitir el derecho de los pueblos» de promover una profunda reforma social.
En defensa del Estado de derecho se pronunciaron también los embajadores de México, Chile y Perú.
Por su parte, el diplomático de Ecuador, Efrén Cocíos, reiteró la convicción del Gobierno de ese país andino y de que debe respetarse el orden institucional, y manifestó que «aprobamos que se conforme una delegación para que se evalué la situación de Honduras, para restablecer la paz y la tranquilidad», y a la vez consideró que la OEA debe responder rápida y colectivamente en la defensa de la democracia en un país, cuyo gobierno ha sido democráticamente electo, y así respetar el principio de no intervención solicitada.
Denis Ronaldo Moncada, embajador de Nicaragua ante la OEA, rechazó por su parte el intento del golpe de Estado técnico contra el presidente Zelaya, e igual respaldo al gobierno legítimo y constitucional del presidente hondureño planteó el representante guatemalteco Jorge Skinner-Klee, y el de Dominicana, Virgilio Alcántara, expresó que en «Honduras se está poniendo a prueba la democracia, para que no termine fracturada (...) y este es el compromiso de la organización, debe salir de aquí hoy un mensaje de democracia».
José Enrique Pinelo, embajador de Bolivia, también manifestó su respaldo al gobierno de Zelaya y exigió el pleno respeto a los valores contenidos en la Carta Interamericana. «En tanto, los pueblos de América tenemos derecho a la democracia, respaldamos el proceso constitucional. Apoyo la iniciativa de Honduras de recurrir al Secretario de la OEA para aplicar la Carta», dijo.
El presidente Zelaya promueve la realización el próximo domingo de una encuesta nacional en favor de la colocación de una cuarta urna en las elecciones generales del 29 de noviembre —junto a las urnas para elegir presidente, diputados y alcaldes— para que se decida si se convoca a una asamblea constituyente que apruebe una nueva Constitución.
Este viernes, confirmó su llamado a los hondureños a realizar una jornada cívica que muestre la democracia y la transparencia del país, mientras cientos de ciudadanos distribuían el material electoral que garantizará la consulta popular prevista para el domingo 28, a pesar de que el Congreso y la Corte Suprema de Justicia rechazan su realización.
Según Notimex para la consulta de este domingo se prevé la colocación de unas 15 000 casillas electorales a partir de este viernes.
La crisis política actual fue provocada por la Fiscalía General y la Corte Suprema de Justicia que declararon ilegal esa encuesta popular, lo que provocó que Zelaya destituyera al Jefe del Estado Mayor de las Fuerzas del Ejército, general Romero Vázquez, porque este siguió las órdenes de las instituciones jurídicas de no implementar la logística que garantizaría la votación dominical.
Zelaya informó que las urnas serán custodiadas por policías del Ministerio de Seguridad.
Este viernes, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon expresó su preocupación por las tensiones políticas e institucionales en Honduras, dijo PL, y pidió a las partes en conflicto contenerse para evitar una escalada de la situación, a la vez que pidió actuar en total respeto a la legalidad y de las instituciones democráticas y buscar consenso a través del diálogo inclusivo y pacífico.
Sin embargo, aclaró que el organismo internacional no tiene previsto realizar un ejercicio de observación de las consultas populares previstas el fin de semana.
Previamente, el presidente de la Asamblea General de la ONU, Miguel D’Escoto, condenó enérgicamente el intento de golpe de Estado contra el presidente hondureño, Manuel Zelaya, una posición conocida luego que el embajador hondureño en la ONU, Jorge Arturo Reina, le informó sobre la seria amenaza al Estado de derecho que vive esa nación de Centroamérica.
