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GUATEMALA, mayo 8.— Los secuestros de niños en Guatemala aumentan a juzgar por datos divulgados hoy, al dar cuenta de ocho capturas de esos en edades de ocho a 12 años en el transcurso de 2010.
Esos corresponden a los registros de la Policía Nacional Civil, el Ministerio Público y la Procuraduría de Derechos Humanos (PDH), donde a estas alturas de 2009 eran contabilizados cinco.
Sin embargo, se considera la cifra aún más alta, pues muchas familias no presentan denuncias ante las autoridades para evitar desenlaces trágicos de los sucesos.
Los departamentos de Escuintla y Quetzaltenango, así como esta capital, son los escenarios preferidos por los delincuentes para cometer esa fechoría.
De acuerdo con lo difundido, la mayoría de los casos encuentra feliz solución en horas o pocos días, pero los hay en que nunca son liberadas las víctimas o aparecen después asesinadas, haya o no mediado pago de rescate.
Un estudio de la PDH sobre datos correspondientes a 2008, citado este sábado por el diario Prensa Libre, afirma que los menores son los escogidos en 37 por ciento de los actos de secuestro.
