El presidente ecuatoriano, Rafael Correa, saludo este lunes a la madre de René González, uno de los cinco héroes cubanos antiterroristas, prisioneros hace 11 años en Estados Unidos, y le reiteró su respaldo al pedido de libertad de estos luchadores.
Irma Schewerert, madre de René y, según sus palabras, también en sentimiento de Gerardo Hernández, Antonio Guerrero, Fernando González y Ramón Labañino, asistió por invitación de Correa al cambio de guardia presidencial de Los Granaderos de Tarqui.
Terminada la ceremonia, el Mandatario conversó con ella, le expresó su solidaridad con Los Cinco, como se les conoce mundialmente, y le pidió enviara saludos a René cuando hablara con él, comentó la propia Irma a Prensa Latina.
En la tarde del lunes, el Comité ecuatoriano pro justicia y libertad de Los Cinco había sostenido un encuentro fraterno con Irma, quien asistió en compañía de Benigno Pérez, embajador de Cuba, otros consejeros de esa Misión, y la directiva de la Coordinadora de Solidaridad con la Isla.
Profesores y alumnos de la escuela primaria Reina Silvia de Suecia entregaron flores a Irma y el presidente del Comité, Hernán Rivadeneira, destacó los acuerdos de la recién concluida XV Asamblea Nacional de Solidaridad efectuada en Loja el sábado último.
En particular destacó el amplio plan de actividades acordado por delegados de las provincias del país, y el llamamiento a constituir comités de apoyo a la libertad de Los Cinco en aulas, Facultades universitarias, centros de trabajo, cooperativas, pueblos y ciudades.
En sus palabras de agradecimiento, Irma destacó la importancia de la movilización internacional para lograr la libertad de los cinco cubanos, y comentó que cada carta enviada a ellos contribuye a garantizar su seguridad en las peligrosas cárceles estadounidenses.
Al concluir la reunión, el embajador cubano elogió el trabajo realizado por el Comité en Ecuador y la repercusión de cada una de las acciones internacionales para acortar el tiempo en que estos cinco jóvenes regresen finalmente a la Patria que lucha y los espera.
