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La cooperación Sur-Sur nos llevará a encontrar los mejores niveles de colaboración en América Latina, aseguró el ministro de Gobierno, Policía y Culto de Ecuador, Gustavo Jalkh en declaraciones a Prensa Latina.
Cada uno mirando y conociendo su propio entorno y con políticas orientadas sobre la realidad de cada país latinoamericano, reafirmó el titular a esta agencia.
La conversación tuvo lugar una vez concluida en Asunción la reunión de Ministros del MERCOSUR y estados asociados, que trató el crimen organizado y la seguridad en la región.
El encuentro ha sido muy fructífero porque la cooperación tiene que mirar las necesidades de cada país y no mirar las necesidades de la cooperación, aseveró.
Jalkh manifestó que la mirada tiene que ser global y creo, agregó, que «este encuentro ha sido particularmente enriquecedor porque hemos visto el problema de seguridad desde una perspectiva amplia».
El ministro ecuatoriano subrayó que estos espacios latinoamericanos y suramericanos son tremendamente útiles porque la agenda es variada, «no es sólo la agenda antinarcóticos, hay que luchar contra el crimen organizado, contra el narcotráfico, que es un flagelo mundial, pero ese no puede ser el único punto en el que trabajemos», acotó.
Tenemos otros aspectos que observar como el mejoramiento del sistema penitenciario, las modalidades delincuenciales que afectan el día a día en la calle a los ciudadanos, y para eso se necesitan, afirmó, respuestas de índole social, de índole policial preventiva, del trabajo de los Ministerios de Salud y Educación.
«La lucha contra la inseguridad es importante porque el crimen organizado y los narcóticos buscan penetrar nuestras instituciones y contaminar nuestra juventud», sentenció.
Al respecto puntualizó que la educación conducirá a elevar los niveles de libertad, «porque el respeto a la vida pasa por el respeto a la salud, y no podemos hacer distinción entre los derechos civiles y políticos y los derechos sociales y económicos».
No podemos decir -aseguró- que una democracia pasa exclusivamente por el derecho a votar o por tener derechos políticos fundamentales de libertad, porque es mucho más que eso, «es acceso a educación, al trabajo, es acceso a salud, es realmente hacer vigente el derecho a la libertad junto al derecho a la igualdad, y no abandonar el uno por el otro».
Es tener los dos derechos como inspiradores de las políticas públicas y eso se aplica también para las políticas de seguridad, enfatizó.
Ante la interrogante de extender ese tema a todos los foros integracionistas del continente, Jalkh respondió que «nosotros vemos los procesos de integración subregional como eslabones de la integración regional».
En ese sentido expresó que a la Comunidad Andina de Naciones, de la cual Ecuador es miembro directo por su condición de país Andino, se suma también el MERCOSUR, del cual somos países asociados, «pero todo eso son eslabones de una gran unidad suramericana y latinoamericana a la cual aspiramos».
