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Manifestantes exigieron la salida de la policía del recinto Río Piedras. Autor: El Nuevo Día Publicado: 21/09/2017 | 05:06 pm
SAN JUAN, febrero 12.— Entonando consignas de rechazo a la presencia de la policía en el campus de Río Piedras de la Universidad de Puerto Rico (UPR), jóvenes estudiantes junto a sus padres o familiares y trabajadores de la casa de altos estudios, marcharon este sábado por las calles de ese recinto en la manifestación bautizada Yo amo la UPR.
Tal y como habían anunciado días antes, desde las primeras horas de la tarde salió desde la Plaza de la Convalecencia, en el centro del casco urbano riopedrense, la multitudinaria manifestación encabezada por los líderes de la Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios (APPU), estudiantes y miembros de diversas organizaciones políticas, profesionales, cívicas y comunitarias.
De acuerdo con el diario El Nuevo Día, notable fue la participación de estudiantes acompañados por padres o familiares que se solidarizan con el reclamo de la comunidad universitaria de que salga la uniformada del campus riopedrense.
Beatriz Miranda, madre de una estudiante de este recinto, dijo que participó de la marcha «para darle a entender al Gobierno que estos muchachos no están solos. Esto es un atropello contra los estudiantes».
La marcha bordeó el campus y pasó por los principales puntos de acceso al recinto riopedrense, en los cuales se encontraban apostados oficiales de la policía, blanco de las frases de rechazo lanzadas por los manifestantes.
Al término del trayecto y tras un multitudinario aplauso, los manifestantes decidieron entrar al campus riopendrense ante la mirada de los oficiales ubicados en el portón principal.
La actividad Yo amo a la UPR se realizó horas después de la renuncia en la noche del viernes del presidente de la UPR, José Ramón de la Torre, quien en carta enviada a la Junta de Síndicos, alegó supuestas «razones de carácter familiar» para justificar su dimisión.
De la Torre ha tenido que enfrentar duras manifestaciones estudiantiles desde el pasado año luego del anuncio del incremento hasta 800 dólares del costo de la matrícula, y por su posterior autorización para que entrara la policía al recinto para reprimir a los universitarios.
El Nuevo Día confirmó además que antes de su dimisión, el directivo le envió una misiva al superintendente de la policía, José Figueroa Sancha, pidiéndole la salida de la uniformada de la UPR.
La retirada del directivo de la UPR no garantiza que la demanda de los universitarios de rebajar el costo de la matrícula sea escuchada ni tampoco que estén dispuestos a debatir los cuatros puntos que los jóvenes exigen discutir con el Gobierno y la administración para acabar con la huelga: «Cero Cuota, más Fondos para la UPR, Fuera la Policía de la UPR y Cero Sanciones», exigen los jóvenes, dijo Telesur.
