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El Fiscal jefe de la Corte Penal Internacional (CPI), Luis Moreno Ocampo, presentó en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (ONU), un informe sobre la situación en Libia, en el que asegura que las fuerzas de seguridad leales al líder Muammar Al Gaddafi cometieron abusos contra manifestantes. Anunció que pedirá tres órdenes de captura por crímenes contra la humanidad, informa Telesur
«En las próximas semanas, presentaré un caso ante la CPI pidiendo a los jueces que emitan órdenes de arresto contra individuos que cuentan con la mayor responsabilidad en los crímenes contra la humanidad cometidos en territorio libio», indicó Ocampo ante el Consejo, aunque evitó detallar la identidad de esas personas.
El abogado afirmó que durante el viaje de una comisión se confirmaron «evidencias de crímenes de guerra en territorio libio», así como «ataques sistemáticos y generalizados contra la población pacífica».
«Las evidencias demuestran que las fuerzas de seguridad han disparado contra manifestantes pacíficos siguiendo la misma operación en otras localidades y son los mismos eventos ocurridos en Túnez y Egipto», dijo Ocampo.
Destacó que «entre 500 a 600 personas han muerto en Libia sólo en febrero pasado según informaciones creíbles».
Sin embargo, reconoció que es difícil estimar el número real «porque muchos de los cuerpos fueron retirados de las calles, no se pudo documentar el número de bajas luego de los enfrentamientos violentos».
Ocampo dijo este miércoles, que emitirá tres mandatos de arresto por crímenes contra la humanidad en Libia.
El fiscal no identificó quienes serían las personas cuya captura quiere solicitar, sólo indicó que dentro de los delitos están el asesinato y la persecución de civiles.
Agregó que la información recibida por la oficina de la Corte, demuestra que la existencia de civiles tanto en Trípoli, capital libia, como en otras ciudades «están sujetos a asesinatos, torturas, ataques y desapariciones forzadas».
Sostuvo que las víctimas son civiles leales o no leales a Gaddafi que participaron en las manifestaciones, mientras aseguró que «continúan las persecuciones y los arrestos».
La CPI, contradice la posición mantenida por el Gobierno libio que asegura que los bombardeos y muertos en el país son responsabilidad de la Organización Tratado del Atlántico Norte (OTAN) junto a la coalición de Estados Unidos, Reino Unido y Francia.
Los civiles armados se han enfrentado en varias ocasiones a militares leales a Gaddafi en busca del control de las ciudades más importantes y enfocados en llegar a Trípoli, la capital del país.
El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, aprobó el pasado 17 de marzo una resolución para establecer una zona de exclusión aérea sobre Libia como presunta medida de protección a la población.
La Organización del Tratado Atlántico Norte (OTAN), comanda una operación militar desde el 31 de marzo con la coalición imperialista contra territorio libio formada por Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Canadá, Bélgica, Italia, España, Dinamarca, Noruega y Qatar que ha puesto en marcha numerosos bombardeos en los que han muerto una cantidad no precisada de civiles, incluyendo a un hijo y tres nietos de Gaddafi.
