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El Ejército libio y milicias rebeldes sostuvieron este domingo recios combates en Yafra y otras localidades de las Montañas Occidentales, mientras el Gobierno recibió masivo respaldo popular y acusó a la OTAN de bombardear a civiles, informa PL.
Testigos informaron que los enfrentamientos se intensificaron a primeras horas de este domingo con disparos de artillería pesada y cohetes en la planicie entre la región bereber de Nafussa, bajo dominio de la insurgencia, y esta capital, bastión del líder Muamar El Gadafi.
Fuentes militares señalaron que en Yafra, 15 kilómetros al oeste de Trípoli, se sintieron bombardeos y ráfagas con ametralladoras pesadas, de modo paralelo a incursiones de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en apoyo a los alzados.
Voceros del opositor Consejo Nacional de Transición (CNT), con sede en Benghazi, añadieron que también se registraron escaramuzas en la zona de Bir Al-Ghanam, situada al norte de Bir Ayad, localidad por donde pasa una carretera estratégica que conduce a Trípoli.
Precisamente, la capital del país fue escenario de una multitudinaria manifestación de seguidores del líder libio, en particular de mujeres que marcharon para respaldarlo y, al mismo tiempo, repudiar la agresión de la OTAN contra su país.
Las féminas mostraban pancartas y gritaban consignas de condena a las más de mil muertes de civiles a causa de las operaciones militares de la alianza atlántica, y exigieron un alto el fuego inmediato porque «no queremos que las bombas sigan matando a nuestros hijos».
Algunas de las concentradas en la Plaza Verde de Trípoli dijeron a periodistas: «queremos decirle a todas las personas del mundo que amamos a nuestro líder, nunca nos rendiremos, nunca lo dejaremos solo y tendrán que matar a seis millones de libios para matarlo a él».
La resistencia del Gobierno de El Gaddafi a más de tres meses de bombardeos aéreos de la OTAN y cuatro de ofensiva rebelde llevó a dirigentes del CNT a replantearse la posibilidad de tomar en cuenta una de las reiteradas ofertas de negociación del líder libio.
«Un arreglo político es posible. Hemos aceptado analizar con seriedad una propuesta, siempre que El Gaddafi no permanezca en el poder», apuntó Abdel Hafiz Ghoga, vicejefe del CNT, mientras la Unión Africana discutía hoy en Sudáfrica otra iniciativa para la paz.
El veterano mandatario subrayó la semana pasada que no se rendiría y resistiría hasta el final, en una alocución para denunciar la matanza de civiles en operaciones del bloque aliado en Khums, Nalut y Surman.
La televisión estatal libia reportó que 15 personas perdieron la vida hace dos días en Brega, en el frente oriente del país.
