Alrededor de 150 carpas fueron instaladas en las inmediaciones de la Casa Blanca en Washington, por los indignados que protestan contra la concentración del poder económico en pocas manos y la desigualdad, iniciativa que comenzó frente al edificio de Wall Street, en Nueva York. Las carpas, desplegadas pese a las lluvias, están ocupadas en su mayoría por jóvenes estudiantes, quienes también protestan por la falta de fondos para pagar sus universidades. Autor: Getty Images Publicado: 21/09/2017 | 05:14 pm
WASHINGTON, enero 31.— Miembros del grupo Ocupemos DC mantienen este martes sus tiendas de campaña en dos parques de esta capital, en abierto desafío a una prohibición de las autoridades del Servicio Nacional de Parques, de permanecer en esos lugares.
Según informó PL, mediante una resistencia no violenta los indignados de la capital estadounidense decidieron quedarse en las plazas MacPherson y Liberty, cercanas a la Casa Blanca, después que venció al mediodía de ayer el tiempo límite concedido para abandonar esos espacios públicos.
Al amanecer los manifestantes no reportaron incidentes violentos, el ambiente es tranquilo y hay poca presencia de las fuerzas del orden en los alrededores de los campamentos, informaron medios de prensa.
No obstante, apilaron todas sus pertenencias y acomodaron las tiendas de campaña en el centro de los parques para obstaculizar intentos de los efectivos de realizar un desalojo.
Por otra parte, a través de sus espacios en las redes sociales Twitter y Facebook, instan a sus seguidores a apoyar la decisión de defender el derecho colectivo a la protesta contra la desigualdad económica imperante en este país norteño.
Asimismo, algunos de los ocupantes colocaron letreros en los alrededores y en sus tiendas con las frases: Desalojado de mi casa por un banco, Desalojado de mi tienda por la policía y El 99 por ciento no tiene lugar seguro para descansar.
La víspera, antes de la entrada en vigor de la prohibición, se registró un incidente entre agentes del orden y un indignado, detenido después de recibir una descarga eléctrica en la espalda.
Ese fue un nuevo caso de uso de fuerza excesiva de las autoridades contra los manifestantes, quienes en varias ocasiones denunciaron a la policía por disipar sus plantones mediante prácticas como golpizas o gas pimienta, permitido solo para acabar movimientos violentos.
Como resultado de los enfrentamientos entre ambas partes suman más de 6 400 el total de arrestos desde el inicio de la ocupación, el pasado 17 de septiembre en Nueva York.
Solo durante el fin de semana, una protesta realizada en Oakland, estado de California, culminó con 400 arrestos.
Pese a la situación actual, los indignados insisten en mantener la lucha hasta que el gobierno atienda sus demandas de aplicar medidas contra la codicia corporativa, el desempleo, la crisis hipotecaria y por justicia social, entre otras.