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DAMASCO, mayo 14.— El Consejo Mundial de la Paz demandó al gobierno del primer ministro turco Recep Tayyip Erdogan la no utilización de los recientes atentados terroristas en la ciudad de Rihaniyya como pretexto para una intervención militar en Siria.
Sin conocer los detalles de los atentados puede intuirse que no es casualidad que hayan ocurrido en la urbe fronteriza, pues es una zona que está siendo utilizada como punto de reclutamiento, entrenamiento y envío de mercenarios armados a este país árabe, consideró ese organismo en una declaración citada por Prensa Latina.
El Consejo subrayó que existen partes que alimentan esos actos criminales y exigió no usar los atentados como pretexto para atacar abiertamente a esta nación levantina.
Denunció también la instalación por parte de la OTAN de misiles Patriot en la frontera de Turquía con Siria, lo cual calificó como un acto de injerencia política y militar para desestabilizar la región.
El documento reafirma los sentimientos de amor y paz de la gran mayoría de la población turca y expresó su solidaridad con las manifestaciones que tienen lugar en más de una docena de ciudades del país euroasiático, con el objetivo de evitar un conflicto y el fin de la injerencia en Siria.
Por su parte, la televisión estatal destacó también el martes la advertencia del gobierno de Austria ante la intención de algunos países de la Unión Europea (UE) para entregar armas a la llamada insurgencia siria.
El medio cita al diario austriaco Day Press que reseña una carta de las autoridades de ese país, donde alerta sobre la amenaza para el Derecho Internacional y las leyes básicas de la UE que supone armar a los irregulares.
Para Viena, tal paso significa una violación de los principios de la Carta de las Naciones Unidas relativas a la política de no intervención y el uso de la fuerza, además de abiertas contravenciones a resoluciones del Consejo de Seguridad en materia de la lucha antiterrorista.
Recuerda la misiva que entre las bandas opositoras armadas se encuentran grupos como el Frente al-Nusra, afiliado a la red terrorista al-Qaeda.
Los gobiernos del Reino Unido y Francia han sido dos de los cuales se han mostrado abiertos defensores de la entrega de material bélico a los mercenarios con el objetivo de derrocar al gobierno del presidente Bashar al-Assad.
