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Henry Kissinger. Autor: AFP Publicado: 21/09/2017 | 05:35 pm
WASHINGTON, junio 27.— Henry Kissinger, ex secretario de Estado durante los mandatos de Richard Nixon y Gerald Ford (1969-1977), afirmó que los medios de prensa estadounidenses mienten sobre la actual situación en Siria.
Al hablar en la Escuela Gerald R. Ford de Política Pública de la Universidad de Michigan, apuntó que se trata de un conflicto entre grupos sectarios; sin embargo, esta apreciación también es insuficiente porque no reconoce que son las naciones de Occidente y su propio país los que han alentado y apoyado a las agrupaciones irregulares que pretenden derrocar el Gobierno del presidente Bashar al-Assad, comentó PL.
Pese a su crítica, Kissinger expresó que le gustaría verlo como un país desintegrado y balcanizado con «más o menos regiones autónomas», la clásica regla de dividir y conquistar.
El Gobierno de EE.UU. trata de propiciar una división más, opinan analistas, quienes evalúan a Henry Kissinger como una de las figuras responsable de miles de muertos en Sudamérica, un avezado político en el arte de ocultar la verdad y el personaje detrás de la intervención de la CIA en varios golpes de Estado en Latinoamérica durante la década del 70, en especial vinculado a la Operación Cóndor y a la dictadura de Augusto Pinochet.
Ahora, el presidente de la Junta de Jefes del Estado Mayor Conjunto de EE.UU., general Martin Dempsey, confirmó que el Pentágono planea enviar contingentes de entrenadores militares a Iraq y Líbano «para ayudar» a estos países «frente a eventuales repercusiones bélicas derivadas de operaciones armadas en territorio sirio», citó a su vez la televisora NBC News,
El alto oficial indicó además, que Washington valora la posibilidad de establecer un canal comercial para la venta rápida de armamentos a Jordania y Turquía, con el mismo propósito.
La directriz planificada por la Oficina Oval tiene como objetivo derrocar al presidente Al-Assad e instruye a organismos como la Agencia Central de Inteligencia a brindar apoyo clandestino a grupos que Damasco califica como bandas terroristas, entre ellas el llamado Ejército de Liberación Sirio, al que harán llegar sofisticados equipos de comunicaciones, según confirmaron voceros de la administración Obama.
Por su parte, el congresista republicano Walter Jones amenazó con solicitar un proceso legal contra el presidente Barack Obama si mueren soldados de EE.UU. en un eventual ataque contra Siria.
Jones dijo que ningún mandatario demócrata ni republicano debe tener la autoridad de violar la Constitución y la voluntad del pueblo norteamericano, bombardeando un país extranjero solo porque no le gusta el líder de esa nación.
El legislador declaró durante una conferencia de prensa, donde republicanos y demócratas hablaron a favor de un proyecto de ley que obligue a la Casa Blanca a consultar con el Congreso antes de armar a las bandas opositoras sirias.
