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Brasileños realizan jornada nacional de protestas. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 05:36 pm
BRASILIA, julio 11.— Paro de labores, marchas y bloqueos de principales vías caracterizan hoy la jornada nacional de protestas de centrales sindicales y movimientos sociales en Brasil, reportó PL.
Convocados por los principales gremios del país, las movilizaciones ocurren en 13 estados brasileños, donde al menos 40 importantes vías permanecen bloqueadas y varias empresas, así como terminales de ómnibus no abrieron sus puertas debido al paro declarado por sus trabajadores.
Las movilizaciones ocurren en los sectores químico, metalúrgico, gráfico, del plástico, construcción civil, textil, educacional, del transporte y los servidores públicos, según fuentes sindicales.
En Sao Paulo, la urbe más rica y poblada de esta nación, se mantienen bloqueadas 11 vías, mientras en la avenida Paulista, miles de personas, portando banderas rojas, de sindicatos y partidos políticos de izquierda, realizan una marcha en demanda de la reducción de la jornada laboral semanal y más inversiones en los sectores sociales.
Entre las principales arterias cerradas al tránsito figuran la Vía Dutra, que comunica a Río de Janeiro con Sao Paulo y la carretera que da acceso al puerto de Santos, el mayor puerto marítimo de América Latina.
En Río de Janeiro, al menos 60 agencias bancarias amanecieron cerradas y la vía que da acceso al puerto de Itaguaí fue bloqueada al tránsito, mientras profesores se reunieron en el Cine Odeon para reclamar mejores condiciones de trabajo y más inversión en educación.
Otras ciudades como Porto Alegre, en Mato Grosso do Sul, Vitoria, en Espíritu Santo; Belo Horizonte, en Minas Gerais, Salvador, en Bahía; Manaos, en Amazonas; amanecieron sin servicio del transporte público.
En Brasilia, el Movimiento de Trabajadores Sin Tierra ocupó la sede del Instituto Nacional de Colonización y Reforma Agraria para exigir agilidad en el proceso de entrega de tierras.
Más de dos mil trabajadores del gremio Fuerza Sindical salieron de la Catedral de Brasilia y avanzaron por la explanada de los ministerios hasta las afueras del Congreso en reclamo de la reducción de la jornada de trabajo hasta 40 horas semanales.
Demandan también una reforma de la ley que reduce las pensiones de quienes se jubilan prematuramente y el archivo de un proyecto de legislación que permite ampliar el número de empleados tercerizados.
